Vamos a utilizar unas hojas de pasta filo para aportarle el toque crujiente a este pastel, que por dentro lleva una muselina a la vainilla y por fuera varios tipos de fruta.
Ingredientes
Para la tarta
- 10 hojas de pasta filo
- 1 puñado de fresas
- 2 unidades de kiwi
- 100 gramos de mantequilla
Para la muselina
- 350 mililitros de leche
- 1 vaina de vainilla natural
- 150 gramos de mantequilla sin sal
- 4 unidades de yemas de huevo
- 75 gramos de azúcar blanca
- 25 gramos de harina de maíz
Preparación
La muselina
- Abrimos la vainilla por la mitad, raspamos las semillas y las mezclamos con la leche; ponemos a calentar en un cazo y cuando rompa a hervir, retiramos del fuego.
- Echamos en un bol las yemas del huevo, el azúcar y la maicena. Batimos con unas varillas manuales hasta que veamos que no queda ningún grumo.
- Ahora vamos incorporando al bol la leche caliente, poco a poco, y sin dejar de batir.
- Volvemos a poner toda la mezcla en un cazo, lo llevamos al fuego y removemos constantemente hasta que la crema muselina espese.
La pasta filo
- Precalentamos el horno a 180 grados.
- Vamos separando las hojas de pasta filo y untándolas ligeramente con mantequilla derretida.
- Organizamos dos tandas cada una de 5 hojas de pasta filo superpuestas y los colocamos en una fuente de horno cubierta con papel.
- Horneamos durante unos 30-40 minutos a 180 grados o hasta que veamos que las hojas se han dorado.
Acabado y montaje
- Pelamos los kiwis y cortamos en rodajas.
- Lavamos las fresas, quitamos el rabito y cortamos en láminas.
- Metemos la muselina dentro de una manga pastelera.
- Vamos poniendo la muselina sobre uno de los bloques de pasta filo horneada.
- Colocamos encima el otro bloque y decoramos con las rodajas de kiwi y de fresa.
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