Este es un postre de origen italiano que se cocina a base de nata aromatizada con vainilla y cuajada, una consistencia especial que se consigue con hojas de gelatina. La vamos a servir en vasitos con una crema de mandarina por encima. El resultado es un dulce que nos apasiona servir en Navidad, con sus notas entre dulces y ácidas.
Gambones al horno, receta fácil y para todos los bolsillosPor Susana Baticón