Nos produce auténtica fascinación esta tarta por su textura ligera, cremosa y esponjosa. Su notable sabor a limón, cuya acidez se dulcifica por el azúcar, también es un plus más para prepararla en cualquier ocasión. Se cuaja en el frigorífico por efecto del frío -es decir que no necesita horno-, pero eso sí, durante bastante tiempo para que adquiera la consistencia oportuna. Lleva varios pasos pero no es nada complicada de elaborar. ¡Y el resultado es verdaderamente increíble!
Para ti que te gusta
Este contenido es exclusivo para la comunidad de lectores de ¡HOLA!
Para disfrutar de 8 contenidos gratis cada mes debes navegar registrado.
Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE
Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.