Esta tarta, de origen francés, compuesta por una masa y frutas -las más habituales son las cerezas- es perfecta para aprovechar las que tengas muy maduras y/o las que estén de temporada. Le vamos a poner, en esta versión, unas ciruelas rojas, y terminamos espolvoreando con azúcar glas una vez horneada y ligeramente templada.
Mini tartas 'tatin' de cebolla caramelizadaPor Susana Baticón