Es un clásico pero a nosotros nos sigue gustando. Antiguamente se tomaba entre plato y plato, sobre todo en banquetes, para el cambio de sabores, pero nos quedamos más con su efecto digestivo y refrescante en el postre. Un sorbete de limón ¡siempre es bienvenido sea la época del año que sea!
Buñuelos de manzana: la receta de la abuelaPor Susana Baticón