El azafrán es una especia muy valorada y cortizada que aporta un toque de aroma y sabor inconfundible a tus platos. Hay que usarlo con moderación -con unas pocas hebras en suficiente- porque si te pasas, pierde su gracia y su encanto. La vamos a usar para incorporarla a unos chipirones guisados.
Ingredientes
- 1 kilogramo de chipirones
- 2 unidades de tomate
- 1 unidad de cebolla
- vino blanco
- caldo de pescado
- 5 hebras de azafrán
- sal
- pimienta blanca
- aceite de oliva virgen
Preparación
- Tienes que empezar limpiando los chipirones y para ello tienes que quitar 'la pluma' interior y las patitas. Quita también las aletas. Dales la vuelta a los chipirones y pásalos por el grifo de agua fría -la piel exterior puedes dejarla o quitarla, aunque aporta bastante sabor-. Sécalos muy bien con papel de cocina y corta en aros.
- Pela las cebollas y corta en juliana muy fina.
- Lava los tomates, seca y pícalos en daditos.
- Echa un chorro de aceite en una sartén grande, ponla al fuego y pocha la cebolla y el tomate.
- Agrega los chipirones con sus tentáculos y aletas y cocínalos unos minutos.
- Incorpora sal, pimienta, el vino blanco, el caldo de pescado y el azafrán, tapa y deja que cueza todo durante unos 25-30 minutos.
- Si ves que se quedan muy secos, añádele más caldo o agua.
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