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'Mini crumble' de pastel de queso helado con menta

150 min
medio
4 comensales

El ‘crumble’ es una masa de harina de trigo, azúcar y mantequilla, con textura desmigada y crujiente que se cocina al horno. Se suele acompañar con fruta, pero en este caso lo vamos a hacer con un pastel de queso helado -hecho con requesón y menta-. ¡Nos encanta el resultado y esperamos que a ti también!

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Ingredientes

Para el 'crumble'
  • 250 gramos de harina
  • 200 gramos de harina de almendras
  • 150 gramos de azúcar blanca
  • 300 gramos de mantequilla
  • ralladura de limón
  • azúcar glas
Para el helado
  • 2 puñados de menta fresca
  • 200 mililitros de nata para montar
  • 200 gramos de crema agria
  • 200 gramos de requesón
  • 75 gramos de azúcar blanca
  • 2 cucharadas de zumo de limón

Preparación

El helado

  1. Lleva a ebullición en un cazo la nata con las hojas de menta y cocina a fuego suave durante 5 minutos aproximadamente.
  2. Retira del fuego y deja reposar otros 15 minutos. Pasa por un tamiz fino y deja que la crema se enfríe completamente.
  3. En un cuenco grande mezcla la crema agria, el requesón, el azúcar y el zumo de limón. Incorpora la crema y mete a enfriar en el frigorífico durante 1 hora.
  4. Pasa por la heladera durante 30 minutos hasta que esté espeso y suave. Guarda en el congelador.

El 'crumble'

  1. Mezcla en un cuenco la harina, con la almendra em polvo, el azúcar y una pizca de sal.
  2. Derrite en un cazo al fuego o en el micro la mantequilla y añádela a la mezcla.
  3. Con ayuda de un tenedor, mezcla muy bien, agrega la ralladura de limón y vuelve a mezclar.
  4. Calienta el horno a 200°C con dos bandejas con papel de horno.
  5. Forma unas 8 bases con la masa (y la ayuda de un molde de anillo de unos 8 cm de diámetro) y reparte en una de las bandejas de horno (sin quitar el molde).
  6. Extiende el resto de la masa en la segunda bandeja.
  7. Introduce ambas bandejas en el horno y hornea durante aproximadamente 20 minutos hasta dorar. Saca y deja enfriar.

Acabado y montaje

  1. Coloca las bases redondas en los platos y llena los moldes con el helado.
  2. Retira cuidadosamente los moldes y congela durante 30 minutos más.
  3. Saca del congelador y rompe la otra masa para colocarla por encima del pastel de queso.
  4. Espolvorea con azúcar glas y sirve.