Este clásico de la repostería francesa es una corona cuya masa es 'pasta choux', que se hornea, se abre por la mitad y se rellena con nata, crema pastelera, praliné, etc. Y se suele terminar con unas almendras laminadas y tostadas y un poco de azúcar en polvo. Recibe su nombre en honor a la carrera de bicicletas que se realizó entre las ciudades de París y Brest en 1891 y la forma del pastel representa una rueda de bicicleta.
'Flan pâtissier' o tarta de flan, el postre que te volverá locoPor Susana Baticón