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Cómo hacer leche frita paso a paso

Una receta humilde y deliciosa muy fácil de preparar

35 min
fácil
4 comensales

La leche frita es uno de esos postres de toda la vida cuya receta pasa de generación en generación y al que no hace falta cambiar nada, ni añadir, ni modernizar, porque así, tan humilde como es, resulta delicioso. Y aunque como todo, puedes disfrutarlo en cualquier época del año, es durante la época de Carnaval, de Cuaresma y Semana Santa cuando la leche frita cobra más protagonismo. Su origen es algo incierto aunque todo apunta a que procede de zonas castellanas de Palencia y Valladolid aunque también hay quien dice que su origen está en el País Vasco. Sus ingredientes básicos son harina, azúcar, huevo, leche y canela, de los que resulta una suave masa que, una vez reposada, se fríe en aceite. Un postre sencillo, humilde y sobre todo delicioso.

Ingredientes

  • leche + 1 vaso
  • 1 unidad de piel de naranja
  • 1 unidad de piel de limón
  • 1 unidad de canela en rama
  • 80 gramos de harina de maíz
  • 100 gramos de azúcar blanca
  • 2 unidades de huevo
  • harina
  • azúcar blanca para espolvorear
  • aceite de oliva virgen

Preparación

  1. Echa la leche en un cazo y ponla al fuego con la piel de naranja y la de limón y la rama de canela.
  2. Calienta sin que llegue a hervir para que se infusione la leche con los aromas.
  3. Disuelve la harina de maíz en el vaso de leche fría.
  4. Retira las pieles y la canela de la leche caliente y añade la mezcla de maizena.
  5. Remueve con varilla hasta que la mezcla vaya espesando.
  6. Forra una bandeja de cristal con papel film, vuelca la mezcla y tapa con papel film para que no se forme costra.
  7. Cuando haya perdido temperatura, mete 4 horas en la nevera para que se enfríe y termine de adquirir la consistencia adecuada.
  8. Bate los dos huevos y pon harina en un plato.
  9. Saca la masa de la nevera y corta en cuadraditos.
  10. Calienta aceite en una sartén, pasa los cuadraditos por harina y huevo batido y ve friéndolos para que se doren por todos lados.
  11. Deposítalos sobre papel de cocina para eliminar el exceso de grasa.
  12. Espolvorea con azúcar ¡y ya tienes tu leche frita lista para comer!