Uno de los dulces por excelencia de la repostería británica, el pastel Battenberg se caracteriza por la original forma de cuadrícula que presenta cuando lo cortamos. Dos bizcochos de dos colores, uno amarillo y otro rosado, que se adhieren entre sí gracias a la melosidad de la mermelada de albaricoque, todo ello envuelto con una masa fina de mazapán. Sin duda, un imprescindible a la hora del té (o a cualquier otra en que nos apetezca un pequeño capricho goloso).
Buñuelos de manzana: la receta de la abuelaPor Susana Baticón