A los antiguos griegos y los romanos les gustaba aromatizar los platos con rosas, al igual que ocurría en la cocina oriental y más concretamente en la gastronomía árabe. Nosotros vamos a emplear el agua de esta perfumada flor para darle un aroma inconfundible a unos bizcochitos de almendra, ideales para tomar con el café.
Ingredientes
- 3 unidades de yemas de huevo
- 450 gramos de mantequilla en pomada
- 200 gramos de azúcar blanca
- 900 gramos de harina
- 1 sobre de levadura en polvo
- 200 gramos de almendras cruda
- 50 mililitros de brandy
- 1 cucharada de agua de rosas
- 1 vaina de vainilla natural
- azúcar glas
Preparación
- Vamos a empezar poniendo el horno a precalentar a 190ºC.
- Tostamos las almendras en una sartén antiadherente con cuidado de que no se quemen y las picamos luego en un robot de cocina.
- Abrimos ahora la vainilla a lo largo, sacamos las semillas con un cuchillo y reservamos.
- En un bol grande batimos la mantequilla y el azúcar con varillas eléctricas y añadimos las yemas, el brandy y las semillas de vainilla.
- Mezclamos bien hasta que quede un compuesto homogéneo e integramos la harina y la levadura tamizadas.
- Echamos harina en la mesa de trabajo, volcamos la masa y la trabajamos un poco con las manos.
- Cogemos porciones de masa con una cuchara y les damos forma de croqueta con las manos.
- Las colocamos en un bandeja de horno forrada con papel sulfurizado y horneamos 20 minutos a 190ºC.
- Sacamos los bizcochitos del horno, cubrimos con el agua de rosas, dejamos enfriar, rebozamos en el azúcar glas y ¡ya estarían listos!
© ¡HOLA! Prohibida la reproducción total o parcial de este reportaje y sus fotografías, aun citando su procedencia.