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La cocina a la plancha es una técnica culinaria perfecta para llevar una alimentación saludable. Aquí cocinaremos de esta manera unos sabrosos langostinos que vamos a acompañar con una ensalada de tomate. Una gelatina de cítricos le dará el toque más original.
Poner en remojo en agua fría las hojas de gelatina. Exprimir las limas y la naranja, colar el zumo y calentarlo al fuego sin que hierva. Retirarlo del fuego, añadir la gelatina escurrida, verterlo en un cuenco, dejar que se enfríe y reservarlo en el frigorífico al menos durante 2 h.
Pelar los tomates, cortarlos en cuartos, retirar las semillas y cortar la pulpa en dados pequeños. Echarlos en una ensaladera con las ramitas de albahaca, sazonar con sal y pimienta recién molida y rociar con 4 c.s. de aceite.
Calentar el resto del aceite en una sartén grande o en una plancha, colocar los langostinos, espolvorearlos con sal gorda y cocinarlos durante 1 min y 30 segundos por cada lado.
Sacar del frigorífico el cuenco de la gelatina y cortarla en dados irregulares. Repartir en los platos los langostinos con la ensalada de tomate y decorar con los dados de gelatina
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