El nutritivo 'english breakfast' (desayuno inglés ) tiene su origen en el Reino Unido, en el siglo XVIII, cuando nobles sin título adquirieron la costumbre de preparar grandes desayunos previos a las largas jornadas de caza para reponer fuerzas. La combinación de huevo, beicon y pan tostado admite múltiples variantes. Nosotros le hemos dado forma de tosta y hemos añadido algún ingrediente adicional.