Otro clásico de la repostería. Mucho más ligera que la crema pastelera, puesto que, al no llevar harinas, tiene una menor densidad. Tiene numerosas aplicaciones: helados, pasteles o tartas, cremas cuajadas... También se consume tal cual como acompañante de frutas y dulces varios. Vendría a ser como una especie de natillas ligeras.
Para ti que te gusta
Este contenido es exclusivo para la comunidad de lectores de ¡HOLA!
Para disfrutar de 8 contenidos gratis cada mes debes navegar registrado.
Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE
Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.