Sorprende a tu pareja este 14 de febrero con un desayuno de San Valentín preparado con mucho amor. Una buena taza de café o un aromático té, un zumo de naranja recién exprimido y un plato de huevos en forma de corazón. ¿Se te ocurre una mejor forma de empezar el día?
Gambones al horno, receta fácil y para todos los bolsillosPor Susana Baticón