salsa bufalo casera© Adobe Stock

Salsa búfalo para alitas de pollo

30 min
fácil
6 comensales

En todo Estados Unidos se comen alitas de pollo fritas o al horno con aderezos más o menos picantes. Es casi un emblema nacional como la hamburguesa o las costillas. Por supuesto, cada estado, cada ciudad… y casi en cada hogar, se prepara un adobo o salsa diferente. El que se hace en Búfalo, la segunda ciudad del estado de Nueva York es tan famoso, que en el resto del país se han instituido las denominadas ‘Buffalo wings’, es decir, alitas al estilo de Búfalo. Os presentamos la salsa búfalo para alitas de pollo… y para muchas otras elaboraciones.

Para ti que te gusta

Este contenido es exclusivo para la comunidad de lectores de ¡HOLA!

Para disfrutar de 8 contenidos gratis cada mes debes navegar registrado.

Este contenido es solo para suscriptores.

Suscríbete ahora para seguir leyendo.

TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE CADA MES POR ESTAR REGISTRADO.

Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.

Ingredientes

  • 60 gramos de mantequilla
  • 150 gramos de salsa tabasco
  • 1 cucharadita de ajo seco molido
  • pimienta negra
  • 1 cucharadita de sal
  • 1 cucharada de salsa perrins (worcestershire)
  • 1 cucharadita de azúcar blanca

Preparación

  1. Para hacer esta salsa búfalo para alitas de pollo comenzaremos por derretir la mantequilla en un cazo a fuego suave.
  2. Cuando la mantequilla esté completamente derretida, incorporamos la salsa picante, que en este caso será tabasco. Añadimos también el ajo seco en polvo, la sal, la pimienta negra y la salsa Perrins.
  3. Removemos bien y añadimos el azúcar.
  4. Cocinamos la salsa Búfalo a fuego suave durante 10 minutos removiendo de vez en cuando.
  5. Si pasado ese tiempo la salsa está muy líquida, podemos espesarla con un poco de maicena. Solo tendremos que disolver una cucharilla de maicena en un dedito de agua en un vaso e incorporarlo a la salsa. Tras unos minutos de cocción, espesará.

Presentación:

Ya está lista para usar nuestra salsa búfalo para alitas de pollo. Con ella podemos aderezar alitas, pero también otros platos de carne y de patatas. Esta salsa también se puede conservar en la nevera durante dos semanas, o incluso hacer una conserva con ella.