masa de pizza© Getty Images

Masa de pizza

80 min
fácil
6 comensales

Si quieres comer una pizza casera como si estuvieras en el mismísimo Nápoles, olvídate de las masas congeladas o refrigeradas y remángate para elaborar tu propia masa de pizza. Es mucho más sencillo y rápido de lo que parece, y los resultados merecen la pena. Recuerda que, en cuestiones de pizza, ¡el secreto está en la masa!.

Para ti que te gusta

Este contenido es exclusivo para la comunidad de lectores de ¡HOLA!

Para disfrutar de 8 contenidos gratis cada mes debes navegar registrado.

Este contenido es solo para suscriptores.

Suscríbete ahora para seguir leyendo.

TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE CADA MES POR ESTAR REGISTRADO.

Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.

Ingredientes

  • 1 kilogramos de harina de fuerza
  • 500 mililitros de agua
  • 30 mililitros de aceite de oliva virgen extra
  • 25 gramos de sal
  • 14 gramos de levadura fresca de panadería

Preparación

  1. Para hacer esta masa de pizza, lo primero que tenemos que hacer es tamizar la harina en un bol, es decir, pasar la harina por un tamiz o colador de trama fina para airearla.
  2. Damos a la harina forma de volcán, con un hueco en el centro.
  3. Aparte, disolvemos la levadura en el agua, que debe estar del tiempo o tibia, pero nunca caliente (esto mataría a la levadura), pero tampoco fría (no permitiría a la levadura activarse).
  4. Echamos el agua con la levadura en el ‘cráter’ de nuestro volcán de harina.
  5. Vamos moviendo el líquido con la ayuda de una cuchara de madera o una espátula de silicona, de dentro hacia fuera, para que poco a poco se vaya mezclando con la harina.
  6. Incorporamos ahora el aceite de oliva virgen extra y la sal, y seguimos moviendo para integrar todos los ingredientes.
  7. Empezamos a amasar, primero dentro del bol y después sobre la encimera, bien enharinada.
  8. Amasamos hasta obtener una masa homogénea, lisa y compacta, que no se pegue en las manos. A medida que se va amasando se puede incorporar una pizca de harina si fuera necesario.
  9. Damos a nuestra masa forma de bola y la colocamos en un bol limpio, ligeramente enharinado.
  10. La cubrimos con un paño y la dejamos reposar, para que fermente, durante 20 minutos o media hora.
  11. Pasado este tiempo, desgasificamos la masa apretándola con los dedos varias veces para que libere los gases que haya podido acumular en su interior durante la fermentación.

Refinar la masa:

  1. El secreto de las mejores masas de pizza en Italia está en refinar la masa durante el amasado. Esta técnica de panadería, el refinado, se emplea con masas de baja hidratación en las que el tiempo de amasado es corto, como son la pizza o algunos panes, como el candeal.
  2. Para refinar la masa hay que estirarla con las manos, como si formáramos un churro o un cable grueso.
  3. Luego este cable se retuerce en espiral y se unen los extremos.
  4. Se vuelve a amasar y se vuelve a refinar una segunda vez. Y se vuelve a amasar. En total, serán unos 10 minutos de amasado y refinado.

Lista para usar… o congelar:

La masa de pizza ya está lista para estirar con las manos o el rodillo hasta dejarla bien finita, poner los ingredientes a vuestro gusto y hornear. Esta masa también se puede congelar, para ello envolverla bien en film, etiquetadla con la fecha de elaboración y llevarla al congelador. Una idea para ahorrar tiempo es hacer más cantidad de masa y emplear la mitad para hacer una pizza al momento, y la otra mitad para congelar. Cuando la vayáis a usar, solo tendréis que sacarla del congelador la noche anterior y dejarla descongelar lentamente, dentro de la nevera.