Con esta receta de alcachofas rebozadas, y más aún si las acompañas con unas patatas fritas en cuadraditos… ni los niños rechazarán esta deliciosa verdura. ¡Pruébalas!
Ingredientes
- 12 unidades de alcachofas de tamaño medio o pequeño
- 3 ramas de perejil fresco
- zumo de limón
- sal
- 3 unidades de huevos
- harina
- aceite de oliva lo necesario para freír
Preparación
- Para hacer estas alcachofas cocidas con vinagreta de hierbas, lo primero que debemos hacer es limpiar las alcachofas. Para ello retiraremos las hojas de la alcachofa hasta arrancar tres o cuatro capas y que se vea ya el corazón bien amarillito de la alcachofa. Cortamos el tallo dejando unos dos centímetros más o menos. Cortamos el extremo de las hojas y, por último, pelamos el tallo y un poco la base con cuidado de no quitar mucha carne.
- Una vez limpias, las partimos en mitades, de forma longitudinal. Nosotros contábamos con alcachofas de tamaño medio, si fueran muy grandes, se deberían partir en cuartos.
- A medida que vamos limpiando las alcachofas las vamos añadiendo a un bol con agua y zumo de limón o bien perejil, para que no se oxiden.
- Acercamos una olla con abundante agua al fuego. Cuando rompa a hervir introducimos las alcachofas, ponemos sal y añadimos unas ramas de perejil. Cuando vuelva a hervir, bajar el fuego y dejamos cocer durante 25 minutos. De todas formas, antes de apartarlas, comprueba que están tiernas.
- Escurre las alcachofas y reserva sobre un papel absorbente para que escurra toda el agua.
- Vamos a preparar nuestra estación de fritura. Colocamos un plato hondo con harina y al lado otro con huevo bien batido.
- Acercamos una sartén al fuego con abundante aceite.
- Vamos pasando las alcachofas por la harina, les damos unos toquecitos con la mano para retirar el exceso de harina e inmediatamente después las pasamos por el huevo batido.
- Cuando el aceite esté bien caliente, vamos friendo en pequeñas tandas para que no se enfríe. A medida que vayan estando bien doraditas por todos los lados, sacamos a un papel absorbente.
Presentación:
Servimos las alcachofas rebozadas inmediatamente, mientras aún están bien calientitas, con un trozo de limón al lado.
© ¡HOLA! Prohibida la reproducción total o parcial de este reportaje y sus fotografías, aun citando su procedencia.