Las olivas negras son aceitunas de mesa que inicialmente eran de color más claro pero que, con la maduración, tienden a oscurecerse. Son ideales para aliñar y como ingrediente de patés, pizzas, ensaladas o panes. Vamos a incorporarlas en unos bastoncillos de pan, muy sencillos de hacer y deliciosos, sobre todo para tomar recientes.
Ingredientes
- 500 gramos de harina
- 20 gramos de levadura de panadería
- 100 gramos de aceitunas negras deshuesadas
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- 1 cucharaditas de sal
- harina para espolvorear
Preparación
- Diluye la levadura con 2 cucharadas de agua caliente en un cuenco grande.
- Añade la suficiente harina para formar una masa blanda mezclando con una cuchara de madera.
- Cubre con papel film y reserva en frío unos 20 minutos, hasta que se forme costra en la superficie.
- Diluye la harina restante con 200 ml de agua templada, añade la sal y el aceite y mezcla con la masa anterior, amasando con las manos hasta formar una bola.
- Cubre con un paño y deja reposar 40 minutos.
- Precalienta el horno a 210ºC y forra la bandeja con papel sulfurizado.
- Pica a cuchillo las aceitunas.
- Enharina la mesa de trabajo, coloca encima la masa e integra en ella las aceitunas picadas amasando con las manos.
- Forma bollitos pequeños con la masa y colócalos en la bandeja de horno.
- Cubre con un paño y deja que reposen 20 minutos.
- Salpica los bollitos con unas gotas de agua y hornea a 210ºC hasta que se doren y estén crujientes: entre 8 y 12 minutos, según el grosor.
- Saca del horno, deja enfriar del todo y ¡listo!
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