Un cena perfecta para todos, en la que no debes emplear más de diez minutos y que, con un sencillo aliño, se convierte en un plato para chuparse los dedos. Y nunca mejor dicho, porque esta receta se come con las manos. Para aligerarla, no la acompañes de patatas fritas, búscale otra guarnición, como una ensalada.
Para ti que te gusta
Este contenido es exclusivo para la comunidad de lectores de ¡HOLA!
Para disfrutar de 8 contenidos gratis cada mes debes navegar registrado.
Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE
Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.