La fresquilla es una fruta de hueso que se da en la época de verano. De pulpa muy jugosa y dulce y piel aterciopelada, es ideal para comer en crudo, pero también y por qué no, podemos incluirla en multitud de recetas: ensaladas, gazpachos, vinagretas... o postres como éste: cocinada a la barbacoa y servida con un helado de leche merengada, que puedes hacer en heladera o sin ella.
Ingredientes
Para las fresquillas
- 4 unidades de fresquillas
- 50 gramos de mantequilla sin sal
- 30 gramos de azúcar moreno
- 1 cucharadas de canela molida
Para el helado de leche merengada
- 500 mililitros de leche entera
- 130 gramos de azúcar blanca
- 1 unidades de canela en rama
- 2 unidades de claras de huevo
- 1 unidades de piel de limón
- 1 cucharadas de azúcar glas
Preparación
Para el helado
- Ponemos la leche con el azúcar, la canela y el limón en un cazo, llevamos a ebullición, retiramos del fuego y dejamos que se enfríe.
- Por otro lado, montamos las claras a punto de nieve con el azúcar glas y mezclamos con la leche hasta que se integre todo.
- Ponemos la mezcla en una heladera. Si no tenemos, metemos en el congelador en un recipiente de plástico, sacamos a las 2 horas y removemos con un tenedor. Repetimos este procedimiento dos o tres veces más. Cuanto más se haga, más cremoso quedará el helado, dejándolo unas 3 horas.
Para las fresquillas
- Derretimos la mantequilla, añadimos el azúcar moreno y la canela y removemos.
- Cortamos las fresquillas por la mitad y quitamos el hueso.
- Extendemos la mantequilla aromatizada por la superficie de la fruta y marcamos en la parrilla 4 o 5 minutos por cada lado.
Presentación
Servimos las fresquillas acompañadas de una bola del helado de leche merengada.
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