El té matcha ha irrumpido en nuestros mercados con fuerza. En japonés, ‘matcha’ significa ‘té en polvo’ y su producción es bastante delicada. Las hojas de té verde de la mejor calidad se recolectan a mano, se pasan por vapor para evitar que se oxiden –y pierdan su característico color verde– y se dejan envejecer para obtener un sabor más rico y complejo. Al cabo de unos meses, se trituran. Con este producto se pueden hacer postres deliciosos, como este flan.
Tarta de manzana, receta clásicaPor Susana Baticón