Las verduras crudas -o ligeramente escaldadas- son una magnífica forma de disfrutar de todas sus vitaminas y minerales, parte de las cuales se pierden si las hervimos, asamos, etc, por efecto del calor. Además aportan una textura crujiente al plato, como en esta ensalada, a la que también vamos a añadir unas gambas ligeramente salteadas, de forma que tendremos una receta templada, ideal como entrante.
Sopa de pescado rápidaPor Susana Baticón