El solomillo, especialmente el de vacuno -ya sea ternera, buey, etc-, es una de las piezas más apreciadas gastronómicamente. Es suave de sabor y tiene una textura bastante tierna. Se cocina en el horno, a la plancha, en salsa, estofado... y también a la brasa, como en esta receta. Lo servimos con una sabrosa salsa tártara, ¡la combinación no puede estar más rica!
Gambones al horno, receta fácil y para todos los bolsillosPor Susana Baticón