Las podemos comprar limpias y troceadas y con ello no generar tantos desperdicios porque se aprovechan al máximo. Las verduras congeladas nos ofrecen la posibilidad de no tener que ir al mercado cada día (su conservación es, lógicamente, mucho más prolongada que las verduras en estado fresco, sin perder sus nutrientes ni propiedades).
Esto sin olvidar que, además, nos hacen la vida más fácil cuando no disponemos de demasiado tiempo para cocinar y que no es necesario descongelarlas, pues directamente las podemos echar en la cazuela con abundante agua hirviendo y sal.
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Además, la Asociación Española de Fabricantes de Vegetales Congelados (ASEVEC) nos anima a consumir estos productos durante las Navidades porque ayudan a desplazar los alimentos ricos en grasas saturadas, azúcares o sal y reducir el número de calorías ingeridas.
Por ello, ha desarrollado un recetario – a base de verduras congeladas como ingrediente principal, que encontrarás en su web – que aporta un gran valor nutritivo sin renunciar al color y sabor en la mesa en esta época.
¿Cómo cocinar las verduras congeladas?
La manera más habitual es cocerlas, pero las verduras congeladas también se prestan a cocinarlas con otras técnicas, como las que enumeramos a continuación.
- Cocidas: la clave está en realizar una cocción muy corta, de 2 a 5 minutos máximo, con el agua hirviendo a 100ºC, y dejando las verduras al dente para que no se pasen.
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- Salteadas: cómodo y rápido, con cuatro vueltas en el wok (o sartén) ya están listas. Es recomendable añadir pocas verduras de cada vez, para que se evapore el agua rápidamente.
- Al vapor: en una cocedera de bambú (o en un olla al vapor), necesitan entre 2 y 5 minutos para estar listas y resultan muy saludables.
Algunos consejos cuando cocinas verduras congeladas
- Si las vas a cocer, un truco es añadirles una pizca de bicarbonato para mantener el color vivo de las verduras.
- Si vas a comer las verduras en el momento no hay problema, pero si tras el escaldado vas a saltearlas, es aconsejable cortar la cocción pasándolas a un recipiente con hielo para que conserven sus propiedades intactas y también sus colores vivos.
- Las especias y hierbas aromáticas también son grandes aliadas de las verduras congeladas. Podemos preparar con ellas cientos de aderezos, es cuestión del gusto de cada uno.
- El microondas es muy interesante para cocerlas ya que, al ser un cocinado corto, mantiene sus nutrientes. Mete las verduras congeladas en una bolsita con 2 cucharadas de agua y ciérrala dejando una pequeña abertura. Depende de la potencia del microondas y la cantidad de verduras, pero estarán hechas entre 2 y 5 minutos.
Recetas fáciles con verduras congeladas
El los grandes congeladores de supermercados y grandes superficies, encontramos una amplísima gama de verduras y hortalizas congeladas. Desde judías verdes, coliflor, espinacas o brócoli pasando por zanahorias o maíz, hasta cebolla, pimiento, calabacín, etc.
Hemos seleccionado varios tipos de verduras ultra congeladas para confeccionar 9 recetas ricas, vistosas y saludables.
Paso a paso: crema de zanahoria fácil
Las verduras congeladas son ideales, entre otras muchas cosas, para hacer sopas y cremas. Esta es una crema muy sencilla elaborada a partir de zanahoria y cebolla que tenemos en el congelador, además de patata y puerro frescos.
Paso a paso: espinacas a la crema y huevo poché
Las espinacas es otra de esas verduras que más habitualmente se encuentran en el lineal de congelados del 'súper'. Vamos a prepararlas con una bechamel ligera, las gratinamos con queso rallado y las terminamos con un huevo poché.
Crema de coliflor con brocheta de tofu empanado
Con coliflor congelada podemos hacer una gran variedad de platos y esta crema es uno de ellos, que está de muerte. Lleva otros ingredientes vegetales y la decoramos con una brocheta de tofu empanado.
Paso a paso: gratinado de coles de Bruselas con salsa Mornay
Pequeñas, tiernas, sabrosas y saludables, las coles de Bruselas se prestan a hacer todo tipo de platos. Las encontrarás casi siempre en la sección de congelados para elaborar recetas como esta, las gratinamos con una salsa Mornay.
Salmón a la plancha con judías verdes
El salmón también es un producto que podemos comprar congelado pero sin duda las judías verdes es una de las verduras más consumidas en este formato. Juntamos ambos para preparar esta saludable y deliciosa receta.
Paso a paso: brócoli al horno con pasas y piñones
Fresco o congelado, para esta elaboración te vale el brócoli en cualquiera de sus dos formatos. La idea es asarlo con ajo, zumo de lima, aceite y sal y fuera del horno, echarle pasas y piñones. El plato es perfecto como entrante o como guarnición.
Paso a paso: ensalada de judías verdes con patata, huevo duro y atún ahumado
Siempre nos gusta tener una bolsa de judías verdes en el congelador -junto a otra de guisantes-. Nos parece un vegetal con el que, en un momento, tienes unos platos estupendos. Esto es una ensalada en la que las juntamos con patata cocida, huevo duro y atún ahumado.
Paso a paso: tortitas de maíz y calabacín con yogur al cebollino
Rallamos calabacín fresco para juntarlo con maíz congelado, harina, levadura, huevo y sal. Con la masa resultante formamos unas tortitas que freímos y servimos con un yogur aromatizado con lima y cebollino.
Paso a paso: dados de salmón con quinoa y guisantes congelados
Los guisantes creemos que es una verdura, pero se trata de una legumbre, un producto vegetal en cualquier caso, de los que más compramos congelados. Los vamos a cocer para este plato, al que también ponemos quinoa, dados de salmón y gajos de tomate.