Prácticamente igual a lo que nosotros conocemos como requesón, la ricotta nos lleva con la imaginación y el paladar a ese rico queso blanco italiano, fresco, de sabor suave y textura granulosa. Aunque, en realidad, si nos ponemos ‘técnicos’, lo cierto es que la ricotta no puede ser considerada un tipo de queso. El motivo es que se produce a partir del suero de la leche que sobra en la elaboración de otros quesos y que se deja fermentar con bacterias lácticas. De manera que, si hablamos con propiedad, deberíamos describirla como ‘derivado láctico’. No obstante, su nombre está muy extendido como queso ricotta; nosotros mismos en ¡Hola! Cocina nos referimos así a él en muchas ocaciones...
Así pues, más allá de disquisciones semánticas, lo que sí es apreciable, es las diferencias entre unas ricottas y otras, en función, no solo de la calidad de esos sueros y modo de elaboración, sino del animal del que proceden: puede ser de vaca (la mayor parte de los casos) pero también de cabra y de oveja, incluso en Italia se elaboran también ricottas a partir de leche de búfala.
Menos calorías que los quesos curados
A nivel nutricional, la ricotta es interesante ya que es rica en calcio, vitaminas del complejo B, como la vitamina B12 y también en proteínas de alta calidad biológica. Además, su contenido en grasas saturadas y sal es más bajo que en comparación a otro tipo de quesos como los curados, por lo que puede ser aliado de dietas enfocadas a la pérdida de peso.
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Pero, quizá, uno de las cosas que más nos gustan de la ricotta es su versatilidad: debido a ese sabor suave, podemos incluirla en recetas tanto saladas como dulces, del desayuno a la cena: tostadas, bowls, platos de pasta, ensaladas, aperitivos, repostería…
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Estas 11 ideas de aquí debajo son solo un pequeño ejemplo de todas esas posibilidades que nos ofrece la ricotta. Para acceder al modo de elaboración solo tienes que clicar en los nombres de las recetas:
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Paso a paso: Ensalada de rúcula, ricotta y fresas
El sabor potente, algo picante y amargo, de la rúcula combina muy bien con el dulzor de las fresas. A estos dos ingredientes vamos a sumar también queso ricotta para preparar una sencilla pero deliciosa ensalada. Fácil, vistosa, rica y saludable.
Paso a paso: Tostas de ricotta, jamón, brevas y nueces
Si andas buscando unas tostas diferentes 'a lo de siempre', echa un ojo a esta combinación de sabor: queso ricotta, rúcula, jamón serrano, unas brevas de temporada y unos frutos secos de tu elección (en este caso emplearemos nueces). Todo 'regado' con una poco de vinagre balsámico. ¡Delicioso!
Paso a paso: Canelones de ricotta, champiñones y salsa de tomate
La ricotta es aquí el ingrediente elegido, junto a unos champiñones y una salsa de tomate, para elaborar este plato de canelones. ¡Mama mía, qué delicia!
Paso a paso: Pepinos rellenos de ricotta y chile
Esta receta resulta un aperitivo delicioso, súper fresco y que no se tarda nada en preparar. Son unos cilindros de pepino, que rellenamos con un queso tipo ricotta mezclado con unas gotas de zumo de limón, aceite de oliva, sal y pimienta. Decoramos con una rodajita de chile y alguna hierba aromática fresca, elige la que más te guste.
Paso a paso: Bowl de melocotón con ricotta y almendras
Otra muestra de la versatilidad del ricotta es este saludable bowl que vamos a preparar con melocotón de temporada. Un tándem gastro que nos encanta.
Paso a paso: Hojaldre de calabacín y queso ricotta
Aquí será la combinación de calabacines y queso ricotta la que vamos a emplear para preparar este delicioso hojaldre. Una receta tan sencilla como sabrosa. ¿A qué esperas para encender el horno?
Paso a paso: Tarta de ricotta, pera y panela
La panela es un edulcorante que tiene el mismo poder de endulzar que el azúcar blanco -por lo que se usan en cantidades parecidas-, pero está sin refinar ni someter a ningún procedimiento químico. Lo vamos a emplear en su formato granulado -también lo hay en bloque- para preparar esta deliciosa tarta de queso ricotta y pera.
Paso a paso: Tostadas de centeno con ricotta y tomates secos
El queso fresco italiano ricotta, de sabor suave y textura granulosa, nos servirá aquí como ingrediente protagonista para la preparación de estas ricas tostadas a las que vamos añadir también unos tomates secos en aceite. El pan será de harina de centeno.
Paso a paso: Cannoli sicilianos
Los cannoli en sus orígenes eran un dulce de Carnaval que nació en la isla de Sicilia pero hoy en día, se pueden encontrar durante todo el año en numerosas pastelerias de Italia. Se trata de unos canutillos que se rellenan de ricotta y se fríen. ¡Una tentación golosa!
Paso a paso: Caracolas rellenas de ricotta sobre cama de boloñesa
Esta receta te sirve perfectamente como un plato único ya que conjuga un poco de todo: proteínas, grasas e hidratos de carbono, aportados por la carne de la boloñesa, el queso ricotta y las caracolas de pasta. ¡Un plato para triunfar!
Paso a paso: Tostadas con ricotta, melocotón, miel y arándanos
Otro ejemplo de cómo el ricotta hace una magnífica combinación con los sabores dulces y de la frtuas con esas tostadas con melocotón y arándanos. Pondremos también un poquito de miel.
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