Ruta 'bio' por las mejores tiendas ecológicas de Madrid

Cocómero Organic Food | Barrio: Legazpi. Cuidarte; esto es lo que quieren conseguir Sara y Eliana con su pequeña tienda de productos de la tierra. Dos amigas que buscaban un cambio progresivo en sus hábitos alimenticios y que, objetivo conseguido, decidieron compartir con todos nosotros. Panes de masa madre hechos con harinas ecológicas, frutas y verduras de temporada y productos sin lactosa o sin azúcares refinados. Miles de opciones para llenar la cesta de la compra sea cual sea tu intolerancia. Además, preparan tu compra para que pases a buscarla y te enseñan, desde su colorido y luminoso local, cómo comer sano no es difícil ni aburrido.

Pepita y Grano | Barrio: Chamberí. Defensores de lo que ellos llaman slow shop, en este pequeño (pero acogedor) local, puedes servirte tú mismo y, si llevas tus propios recipientes, obtienes un descuento. Porque además de orgánicos, quieren ser lo más ecológicos posible. Grandes defensores de la comida hecha en casa, te atienden de forma personalizada y llenan sus paredes de recetas y organizan talleres para que puedas llevar tus habilidades culinarias al siguiente nivel. Sus productos se dividen entre lo nacional y los ingredientes importados, pero siempre naturales y con el precio justo.

Casa Ruiz Granel Selecto | Barrio: Chamartín. Con varias tiendas repartidas por la capital, ellos fueron uno de los primeros de Madrid en recuperar la venta de productos a granel. Y es que aquí, todo se vende al peso para conseguir la despensa perfecta. Sacos repletos de legumbres, de diferentes pastas y decenas de frutos secos. Aún a pesar de la cantidad de ingredientes que tienen, todo está tremendamente ordenado y etiquetado, para que puedas elegir entre sus 40 variedades de judías, sus infusiones, cafés, tés y sus apreciadas setas. La clientela es muy variopinta y han hecho de sus locales, esa vecina a la que acudir a por un poco de sal.

Bio c’Bon | Barrio: Salamanca. Esta cadena de supermercados nació en Francia hace ya más de diez años y, desde 2015, se han instaurado en varias zonas de Madrid, intentando crear lazos cercanos con sus vecinos. Porque esa es su filosofía y la clave de su éxito. Sus productos frescos son los más demandados, con una carne que llega cada mañana a sus tiendas desde proveedores de proximidad con certificados ecológicos, libres de químicos y aditivos. Pero su gran variedad permite que toda la familia tenga su sitio. Además, organizan eventos bio, tienen un equipo de running, un mes detox y numerosas citas de showcooking.

Herbolario Navarro | Barrio: Chamberí. Con más de 30 tiendas repartidas por el territorio nacional, aquí puedes encontrar todo lo que verías en un supermercado tradicional, pero en versión ecológica y natural. Desde su carnicería al corte hasta su panadería del día sin gluten que ha buscado siempre el que aprendamos a mantener una vida sana. En sus más de 250 años de historia, han sabido mantener esa esencia que, aseguran, les define: “salud natural”. Entre su personal, siempre encontrarás nutricionistas encantados de poder ayudarte con tu compra.

El Huerto de Lucas | Barrio: Chueca. Se define a sí mismo como un “proyecto ecogastrocultural” que fue fundado hace ya casi 5 años con la firme creencia de que la primera medicina es la alimentación que nos proporcionamos. Sí, porque somos responsables de lo que comemos. Y para ayudarnos en esa responsabilidad, este espacio completamente diseñado para convertirse en un oasis urbano bio-saludable de referencia en la capital nos ofrece productos 100% orgánicos, libres de tóxicos y que han sido cultivados con un uso racional de los recursos naturales. Sus frutas y verduras no se importan ni se guardan en cámaras frigoríficas, su amplia selección de quesos y embutidos se elaboran de forma artesanal y se traen de empresas familiares que, por ejemplo, crían cerdos ibéricos ecológicos, y su cantina nos demuestra cómo elaborar un menú completo y equilibrado con los productos que venden.

Organic Food & Market | Barrio: Hispanoamérica. La primera planta de sus más de 1.000 m2 está dedicada a un pequeño mercado de productos orgánicos en el que las frutas y verduras son traídas a diario, sus panes de masa madre vienen del exquisito obrador La Magdalena de Proust y su amplia selección de granolas es la envidia del barrio. Semillas, barritas y paquetes de proteínas de origen vegetal, productos todos ellos que completan este pequeño espacio con los que Samantha, una de sus fundadoras, asegura cocinan todos los platos que sirven en su restaurante y esas propuestas take away que, cada día, hacen las delicias de los que tienen sus oficinas cerca. Con muebles reciclados y la madera como protagonista, este auténtico oasis green resume la búsqueda de una gastronomía cada vez más (y más) sana.