CALÈNDULA (BAIX EMPORDÀ, GIRONA)
Descubrir la cocina de Iolanda Bustos es toda una experiencia. Pero lo es aún más salir al campo en su compañía para ir recolectando lo que nos vamos a comer. Conoce como nadie las flores, arbustos, plantas y semillas, su aspecto y sus usos, pero también los ciclos de la luna y toda una disciplina, la biodinámica, que ella aplica magistralmente a su cocina. En su restaurante Calèndula, en el coqueto pueblecito de Regencós, en el Baix Empordà, ahora estás a tiempo de probar el menú micológico con el que participa en las jornadas Tocats pels Bolets de La Cuina de l'Empordanet (junto a una decena más de restaurantes), que incluye seis platos, como el Calamar de potera con trompetas de la muerte o la Cebolla asada a la sal con setas y butifarra de perol (en la imagen), además del postre, un tronco de chocolate con líquenes balsámicos y las reconfortantes tisanas recogidas por la cocinera.
Foto: Lluisa Ramos