‘Oops! I dropped the lemon tart’ (o lo que es lo mismo: ¡'Oops, se me cayó la tarta de limón'!). Otra de las grandes creaciones del chef que, en realidad, tiene como origen un descuido: Al cocinero Taka, 'mano derecha' de Bottura en el restaurante, se le resbaló durante uno de los servicios un plato de tarta de limón. '¡Para!, ¡no te preocupes!, ¡esto es precioso!, ¿no te das cuenta?', le dijo Massimo a Taka, muy avergonzado por su tropiezo. Tanto gustó a Bottura el resultado estético de este accidente casual, que desde entonces lo imitan al detalle, dando lugar lo que se ha convertido en un verdadero clásico de Osteria Francescana. Foto: Paolo Terzi.