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Atrio, con dos estrellas Michelin, es uno de los templos culinarios de Cáceres. Aquí, gastronomía, historia y arquitectura se funden para dar lugar a un restaurante (y a un hotel) único. Fotos: www.restauranteatrio.com

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A pesar de que 2015 será sin duda el año gastronómico de Cáceres, Atrio lleva tiempo ocupando un puesto de honor entre los restaurantes más punteros del mundo.

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La bodega de Atrio, de espectacular arquitectura, acoge algunas de las colecciones de vino más importantes. Entre ellas, una vertical completa del mítico Chateau d’Yquem, que va desde 1806 hasta nuestros días.

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Toño Pérez, chef de Atrio, ostenta el honor de poseer dos estrellas Michelin. Su cocina lleva años en lo más alto del panorama gastronómico mundial.

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Siempre hay motivos para visitar Cáceres, Capital Española de la Gastronomía 2015, que toma el relevo de Vitoria, ciudad que ocupó la capitalidad durante el año pasado.

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Lo mejor de la gastronomía tradicional no está reñido con la vanguardia. Cáceres da buen ejemplo de ello en platos como estas tradicionales migas, uno de los platos con más historia de Extremadura.

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Algunos de los mejores ejemplos de comida fusión se encuentran en la barra de La Minerva, una estupenda elección para salir de tapeo en el centro histórico de Cáceres.

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Eustaquio Blanco es una de las mejores opciones donde probar, y disfrutar, de un buen plato de migas. Aunque sus fogones siguen sorprendiendo con tapas más vanguardias como la de la imagen.

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Cáceres, la despensa de Extremadura, guarda con recelo tradicionales recetas gestadas históricamente en el interior de sus palacios y monasterios.

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El jamón DO Extremadura es uno de los mayores exponentes gastronómicos y uno de los productos más codiciados del mundo.

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Al igual que el jamón, los quesos de Cáceres son toda una institución. Elaborados de forma artesanal, se pueden hacer rutas temáticas para descubrir lo mejor de este delicioso producto.

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