,type=downsize)
No son pocos los chiringuitos de nuestro litoral convertidos cada verano en ‘oasis de postal’ (quien dice postal, dice Instagram): decoración espectacular, gente guapa, sesiones de los mejores DJ’s, hamacas frente al mar en las que uno se quedaría a vivir... Ahora bien; ¿en cuántos de esos Beach clubs de moda la cocina es un valor añadido?... Lamentablemente, no tantos.
Lee también: Los mejores chiringuitos del verano, en nuestro nuevo número especial de ¡HOLA! Cocina
© Grupo MoshPlaya Padre, uno de los chiringuitos más molones de la costa marbellí
Por fortuna, de cuando en cuando nos encontramos con gratas excepciones, caso del chiringuito en el que hoy hundimos nuestros pies descalzos… Estamos en Playa Padre, en la marbellí Playa del Cable. Bastan solo unos segundos tras atravesar sus puertas para que el mundo parezca un lugar mejor: las vistas al Mediterráneo, claro, ayudan. Pero también el precioso entorno, palmeras tropicales, un interiorismo supercool y evocador, turistas apurando sus cócteles, aroma a salitre, a verano, a felicidad.
Al grupo de hamacas ubicadas en la arena, se suman varias mesas, también en plena playa, y otras tantas en la parte techada. ‘Si, además, se comiera bien sería el paraíso’, acude raudo el pensamiento. Y resulta que sí; que el paladar puede ser bastante feliz en este lugar.
Lee también: Lista OAD: ¿cuánto cuesta comer en los 4 mejores restaurantes españoles?
© Grupo MoshEn Playa Padre la cocina se cuida tanto como la decoración o las sesiones de música
La ‘culpa’ la tiene el grupo de emprendedores al frente del Grupo Mosh al que pertenece este chiringuito. Hace ya siete años que abrieron su primer local en Marbella, Mosh Fun Kitchen, al que siguió Playa Padre (luego llegarían otros establecimientos, cada uno con su personalidad: Momento, Nido, Nu Downtown… todos en la provincia de Málaga). No tardaron en posicionarse como referentes de la Costa del Sol en conceptos de ocio y entretenimiento. Pero es que, además, los propietarios querían también poner el foco en la ‘cosa del fogón’; que la gastronomía no quedara relegada a algo secundario, sino darle la relevancia merecida. Y ahí es donde entraba en juego el chef Franco Franceschini.
COCINA VIAJERA Y EL MEJOR PRODUCTO LOCAL
‘¿De verdad vas a poner alitas de pollo en la carta?’, le preguntaban. Quizá aquel no era el plato más glamuroso para un local así. ‘Si realmente queréis que me ocupe de la cocina debéis darme libertad y confiar en mí’, contestaba Franco a los dueños. Y, felizmente, lo hicieron. Tras su paso por restaurantes de renombre en Nueva York o Francia (entre ellos, casas de la talla de Paul Bocuse), este cocinero argentino recalaba en Marbella para convertirse en chef ejecutivo de todos los restaurantes del grupo.
© Grupo MoshFranco Franceschini, chef ejecutivo del Grupo Mosh
En Playa Padre su propuesta pasa por una carta de sabores muy viajeros: México, por supuesto, está presente, pero no solo: aquí también hay Mediterráneo y hay Oriente. El festival arranca con un buen puñado de entrantes para compartir: hummus, ceviches, tartares, tacos como el de cangrejo de concha blanda o el -riquísimo- de cordero pibil; el Pulpo de Güey, y esas Alitas Padre que por suerte le permitieron incluir… En el apartado de pescados resulta deliciosa la Lubina zarandeada, también las piezas a la parrilla o la amplia selección de sushis, sashimis y nigiris, mientras que los más ‘carnívoros’ pueden disfrutar de bocados como el Solomillo con mole negro, el Pollo enchipotlado, la Wagyu Burger o cortes argentinos como Ojo de Bife o Arrachera.
Lee también: La picaña: el corte de carne que todo el mundo quiere probar
© Grupo MoshLos sabores mexicanos, mediterráneos y orientales confluyen en la carta de Playa Padre
Una carta corta de postres pone el broche dulce, aunque más interesante resulta si cabe la oferta de cócteles. Y es que también el apartado ‘líquido’ está muy cuidado. En él encontramos desde tragos clásicos (Piña Colada, Mojito, Moscow Mule, Daiquiri…) hasta una selección de cócteles con sabor a México (con el tequila y mezcal como ingredientes estrella), o sus ricos tragos ‘alcohol free’.
NIDO, MOMENTO Y NU DOWNTOWN: A CADA LOCAL, SU PROPUESTA GASTRO
No pierden el ‘sello Franceschini’ las otras cartas que el chef diseña junto a su equipo para el resto de locales del Grupo Mosh. Cada una, eso sí, con su identidad propia. Así, por ejemplo, en Nido, bonito Beach club de carácter familiar ubicado en Estepona, la cocina mediterránea inspirada por los productos de Kilómetro 0 es la que manda: Salmorejo clásico; Tartar de aún rojo con trufa y aceite de albahca; Bogavante con Vermicelli; Arroz negro con sepia y puntillitas; Almejas a la andaluza; Gambón al ajillo; Sartená de huevos patatas y pimientos… son algunos de los platos presentes en una carta, de cuyo apartado goloso merece especial atención el Flan Casero La abuela. Receta heredada que Franco reinterpreta y que resulta un verdadero espectáculo.
Lee también: Hoy, de postre… ¡flan de frutas!
© Grupo MoshBogavante con Vermicelli, uno de los platos de la carta del Beach Club Nido
En las antípodas de Nido está Momento. Del concepto familiar del primero, pasamos aquí a uno de los clubes nocturnos de música electrónica más reconocidos de Marbella. Pero esto no significa que, nuevamente, aquí la comida tenga un papel secundario. Así, los amantes de la cultura de clubbing que previamente quieran cenar en el precioso restaurante que se ubica en un espacio anexo, pueden disfrutar de la cocina sofisticada y de sabor nikkei que aquí propone Franco, con especial mención en este caso a una carta de cócteles con los que es mejor tener cuidado: ¡imposible probar uno solo!
Lee también: Ceviches, tiraditos, anticuchos, nigiris... y pisco. Aquí se cocina el Perú más auténtico
© Grupo MoshMúsica electrónica, cocina de inspiración nikkei y estupendos cócteles, la propuesta de Momento
Y si estás por Marbella y te apetece una cena son sabor asiático en formato dinner show, quizá Nu Downtown pueda ser buena opción; el último local en sumarse al Grupo Mosh se ubica -aunque con entrada independiente- en el Hard Rock Hotel Marbella y ofrece una experiencia cosmopolita, en un espacio de diseño con espectáculos en directo y donde la despensa de Oriente se fusiona con ingredientes de Occidente en bocados como Ceviche de atún filipino; Gyozas de carrillera con curry verde; Arroz frito con huevo; Pato Pekin, Ostra con gazpacho de chile o el delicioso Katsu Sando de Wagu.
También Asia está presente en la selección de cócteles, de nombres tan sugerentes como Tokyo Bellini; Sake Mojito; Asian Swizzle; Sakura; Yokohama Mule…
© Grupo MoshKatsu Sando de Wagu, un imprescindible si visitas el restaurante Nu Downtown
Distintos conceptos y una cocina de calidad como hilo conductor para un grupo de restaurantes en clave trendy, cuya oferta gastro está lejos, muy lejos, de ser anecdótica.
Precio medio (sin bebidas):
Playa Padre: 60€
Nido: 80€
Momento: 80€
Nu Downtown: 50€
Más información:
https://grupomosh.com
Lee también: El mejor restaurante del mundo es Central, en Lima (Perú)
