A nosotros nos cuesta elegir. Ambas sopas frías, tanto gazpacho como salmorejo, nos fascinan. Son ligeras -uno más que otro-, resultan muy refrescantes, llenos de vitaminas y, encima, ¡están deliciosos! Hoy queremos contarte en qué se diferencian, cuáles son las peculiaridades de cada uno y mostrarte su elaboración. Comparten su origen andaluz y el tomate como ingrediente protagonista pero, a partir de ahí, admiten numerosas variedades tanto uno como otro.
El gazpacho
Prácticamente se elabora en cada rincón de nuestro país -cada uno con sus variaciones- aunque parece que sus raíces están en diferentes lugares de Al-Ándalus, en el siglo VIII, aunque hoy se reconozca como una receta originaria de Córdoba. Se ha convertido en todo un símbolo de la cocina española, como la paella o la tortilla de patatas, y es en verano cuando más se toma, debido a que es una sopa fría muy refrescante y ligera, que calma la sed y nos ayuda a hidratarnos.
Curiosamente, en su origen, el gazpacho no llevaba verduras de ningún tipo, sino que se componía simplemente de pan remojado en agua, aceite y vinagre, al que a veces se añadía ajo o almendras. El añadido del tomate, el pimiento y el pepino no llegaría hasta más tarde, cuando estos ingredientes llegaron a España.
Hay otros platos que también reciben este nombre, como por ejemplo en Castilla-La Mancha, pero que nada tienen que ver con nuestra sopa fría protagonista. Se habla de él en el Quijote y es el gazpacho manchego o 'galianos', una torta grande y redonda de harina cocida en las brasas de un fuego, sobre el cual se pone un guiso de carne de caza y algunos vegetales.
Entre los ingredientes del gazpacho 'más ortodoxo' no pueden faltar los tomates, el pepino, la cebolla, el pimiento, el ajo, el vinagre, el aceite de oliva y la sal. Hay quien para aligerarlo, le pone también un poco de agua al triturarlo y quien le añade un poco de pan para darle una textura más consistente.
Esta es la mejor receta de gazpacho
El salmorejo
De textura más densa y cremosa que el gazpacho, se le atribuye un origen cordobés, pero parece que sus antecedentes se encuentran en tiempos prehistóricos en una forma de cocinar que era majar los ingredientes con piedras (pan remojado en agua, vinagre, aceite, ajo crudo y sal, conocido como 'mazamorra') y que era común en muchos lugares. Aparece la palabra 'salmorejo' en el Diccionario de la RAE de 1737 pero hace referencia a "una especie de salsa con la que se aderezaban los guisos de conejos".
El salmorejo más tradicional utiliza como ingredientes tomate, miga de pan, ajo, aceite de oliva virgen extra, vinagre y sal, que se trituran y se sirve con taquitos de jamón y/o huevo cocido picado.
La incorporación del tomate fue bastante posterior pues no llegó a España hasta el Descubrimiento de América, pero parece que el salmorejo tal y como lo conocemos hoy en día no nació hasta finales del siglo XIX, primeros del XX. Y dependiendo de la zona donde se elabore, presenta algunas diferencias. Por ejemplo, en la localidad de Rota hacen un plato, de nombre 'arranque', a medio camino entre el gazpacho y el salmorejo, que lleva tomate, pimiento, ajo, pan, aceite de oliva y sal y se hace en el mortero, aplastando los ingredientes, de forma que dejan una textura con tropezones. Y en la localidad malagueña de Antequera hay un plato muy similar al salmorejo que se llama 'porra antequerana' -en el que a veces le ponen pimiento y vinagre-.
Cómo hacer el salmorejo perfecto
Ahora que ya sabes más sobre estos dos magníficos platos de nuestra gastronomía, queremos saber con cual te quedas: con el gazpacho o con el salmorejo. Descomenta el siguiente script si tu site no lo tiene ya incluido.
¿En qué se parecen el gazpacho y el salmorejo?
- Son de origen humilde y antaño estaban muy vinculados al mundo rural
- No se conoce bien dónde y cómo nació cada uno de ellos
- Ambos llevan tomate, ajo, aceite de oliva, vinagre y sal
- En sus orígenes, los dos se hacían majando sus ingredientes, pero hoy se trituran con una batidora, licuadora o robot de cocina
- Son nutritivos y refrescantes, contienen numerosas vitaminas, minerales, fibra... Y los dos se toman fríos
¿En qué se diferencian el gazpacho y salmorejo?
- El pan es imprescindible en la elaboración del salmorejo aunque hay quien también se lo pone al gazpacho -sobre todo en sus inicios, porque era una manera de aprovechar el pan duro de días anteriores remojándolo en agua-
- El salmorejo solo lleva tomate, pan, aceite de oliva, ajo y sal y el gazpacho incorpora esos ingredientes pero también cebolla, pimiento y pepino
- El gazpacho, cuando no lleva pan, es más ligero y menos calórico que el salmorejo
- La textura del salmorejo es más cremosa que la del gazpacho, que resulta menos densa
- El salmorejo suele decorarse con taquitos de jamón y huevo duro, mientras que el gazpacho, a veces, lleva un picadillo de las mismas verduras con las que se elabora
Saber más: 5 trucos para evitar que el gazpacho no repita
Algunos trucos para hacer gazpacho y salmorejo
- Los dos admiten la incorporación de otros ingredientes para 'versionarlos' como frutas, otras verduras, etc
- 'Juega' con los elementos de decoración: al gazpacho le van muy bien daditos de pan y trocitos de fruta -sobre todo si la llevan en su elaboración- y al salmorejo le queda de lujo -y asi se hace en algunos lugares- ingredientes como el atún en conserva, la mojama, la cecina, etc
- Hay un truco para no poner pan al salmorejo, aligerarlo, y cosnseguir aportar textura que es añadir verduras hervidas o asadas y/o huevo duro -pelado y entero, con su clara y su yema-
- El gazpacho admite muy bien un toque de comino en polvo, pero sin pasarse