La última entrega de MasterChef Celebrity fue muy emotiva para una de sus concursantes. Raquel Meroño, la popular actriz de Al salir de clase o Yo soy Bea, se reencontró entre fogones con su exmarido Santi Carbones, con quien mantiene una excelente relación y tiene dos hijas, las mellizas Martina y Daniela, de 13 años. La expareja dio una lección en televisión de cómo una pareja debe afrontar una separación por el bien de las niñas.
"Este martes nos hemos saltado una entrega de @masterchef_es por el fútbol pero la semana que viene nos vamos a la playa. Va a ser un programa extremadamente especial para mí...Os iré contando! Una pista... #tarifa", anunciaba la actriz antes de la emisión del programa. Pues bien, anoche, se reunieron en el chiringuito, Carbones 13, el negocio de su exmarido en esta localidad gaditana para que Raquel Meroño probara suerte entre fogones. Lo hizo en presencia de su ex y sus hijas.
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'¿Y esas lágrimas, Santi?'
Durante toda la prueba Raquel y Santi compartieron besos, bromas, sonrisas y complicidad, gestos que vinieron a demostrar que pese a no estar juntos existe un inmenso cariño entre ambos. Hubo un momento muy emocionante protagonizado por el padre de Martina y Daniela. "¿Y esas lágrimas, Santi?", le preguntaba Samantha Vallejo Nágera, a lo que el empresario respondía emocionado de ver el orgullo con el que sus hijas hablaban de su madre: "Pues por la situación y por todo". Sus hijas Martina y Daniela estaban encantadas del buen hacer de su madre en la cocina: "Para nunca haber cocinado cada vez va mejor", bromeaban.
Meroño y Carbones se casaron en 2011 por el rito balinés, después de cinco años de noviazgo. En 2007 nacieron sus dos hijas, Martina y Daniela, que son el gran orgulloso de la expareja. Este chiringuito. que se convirtió en el escenario de MasterChef Celebrity, fue arrasado por un temporal a principios de 2018, dejando a la pareja desolada tras ver hundido el negocio familiar. Meses después Raquel y Santi ponían fin a su matrimono por el desgaste propio de la convivencia. Su relación siempre ha sido buena y así lo volvieron a demostrar- "Este día va a ser difícil de olvidar", decía emocionada Raquel Meroño tras la prueba.