Claras de huevo y azúcar, bien batidas, con firmeza y una textura que todos definimos como ‘a punto de nieve’. Ésta es la base de todo buen merengue. Sin embargo, no todos nos atrevemos a realizarlo y son muchas las preguntas que suelen rodear su paso a paso. Pero, en realidad, no es en absoluto difícil. Al igual que un merengue, no es para nada insulso y aburrido. Puede ser por ésto por lo que no suelas elaborarlo en casa. Desde ¡HOLA! Cocina vamos a quitarte esas dos ideas de la cabeza, a base de consejos y recetas. Y recuerda, puede ser blando (como el merengue italiano) o duro, al ser cocido al horno. Tú eliges, pero atrévete con él.
Consejos para un merengue perfecto
- Separa, al menos un día antes, las yemas de las claras y guárdalas en la nevera en un tarro de cristal hermético.
- El agua y el azúcar, para elaborar el merengue italiano, ha de llevarse a ebullición a fuego medio.
- Es mejor utilizar unas varillas eléctricas para conseguir ese ‘punto de nieve’ que buscamos. Y, bajo ningún concepto, dejaremos de batir hasta conseguirlo, pues solo conseguiremos que nuestra mezcla baje, desapareciendo su volumen.
- Cuando estemos montando nuestras claras, añadir un pellizco de sal.
- Si vamos a cocer nuestros merengues, para conseguir una consistencia dura, hemos de hacerlo a temperatura baja y nunca superar los 120 °C. Si no, se nos quemarán.
Recetas diferentes con merengues
O bien porque acompañan otros postres, funcionando como cobertura, o bien porque se aromatizan con algo más que solo azúcar, como la vainilla o el chocolate, estas recetas usan el merengue para enriquecer otras recetas tradicionales que, con él, suman enteros en sabor, textura y, por supuesto, visualmente hablando.
Paso a paso: tarta de limón y leche condensada
La primera de las recetas nos lleva a la cobertura de la tradicional lemon pie, pero le damos una vuelta de tuerca tanto al relleno de crema, al que le agregamos un poco de leche condensada y a la cobertura que, simplemente, lo doramos un poco en el horno.
Paso a paso: merengue de pistachos con fresas y frambuesas
La segunda receta que te proponemos nos deja al merengue como base y protagonista de una receta que sabe a verano, gracias a las frutas que le sirven como sirope: fresas, frambuesas y fruta de la pasión.
Paso a paso: compota de fresas y ruibarbo con merengue
Aunque el ruibarbo es un ingrediente algo desconocido en nuestra gastronomía, merece la pena salir a su búsqueda y captura para crear esta deliciosa compota que nos servirá como un postre muy socorrido cuando las temperaturas suban aún más.
Esta receta es una auténtica golosina, pero bastante más saludables que las industriales que podemos encontrar en cualquier tienda o supermercado. Son pequeños bocados con sabor a cacao y la textura propia del merengue al horno. Perfectos para acompañar cualquier merienda.
Paso a paso: tiramisú de manzana verde con merengue
E igual que el postre anterior es perfecto para conseguir un postre colorido y fresquito, este tiramisú frío es otra de nuestras recomendaciones si quieres sorprender a tus invitados.
Paso a paso: compota de albaricoques con merengue caramelizado
Y si lo queremos aún más fácil, esta compota de albaricoques, una fruta de sobra conocida en nuestro país que se corona con un merengue mezclado con yogur para una textura más densa, perfecta para un desayuno o merienda. Además, va caramelizado al final.
Paso a paso: merengues con fresas
Quizás sea ésta la receta de merengue más sencilla, puesto que lo utilizamos como base y lo bañamos con un puré de fresas también casero. Nuestra recomendación es que lo cuezas bien al horno para que este topping no deshaga su volumen.
Paso a paso: tarta de merengue de limón
Por último, la versión de la tarta de limón, con el relleno más clásico y la cobertura tradicional de merengue, para el que necesitarás una técnica muy depurada, pues los picos han de quedar con gran volumen.