Seguro que lo has experimentado muchas veces. Un alimento te encanta y, de pronto, un día lo pruebas en compañía de otro y… ¡boom! El resultado de esa combinación te gusta más todavía. Como siempre decimos, pocas cosas hay más personales que el gusto individual: lo que a uno le fascina al de al lado puede dejarle frío. Sin embargo, existen algunas parejas gastro con las que es difícil equivocarse. Hoy vamos a proponeros algunos de esos tándems que suelen funcionar bien dentro del terreno de los quesos.
Y es que, hasta que los bares y restaurantes vuelvan a abrir sus puertas, nos seguirá tocando prepararnos el aperitivo en casa. Si en el tuyo no suele faltar el queso, echa un ojo a estas recomendaciones de maridaje:
EL PAN
- En líneas generales podemos decir que los panes artesanos cocinados al fuego de leña y los panes de fabricación artesanal acompañan todos los tipos de quesos.
- El pan tostado y las galletas tipo craker (imagen inferior) son buenos acompañantes, sobre todo para los quesos cremosos.
- Cuanto más delicado sea el queso, más blanco y menos salado debe ser el pan.
- Los panes tipo Viena o de corteza azucarada van muy bien con los quesos azules y los de pasta cocida (gruyère, emmental, etc). No obstante, se puede experimentar con otros tipos de pan.
FRUTAS DESECADAS
Las frutas desecadas (pasas, higos secos, orejones, dátiles, etc) al concentrar todo su sabor dulce, combinan con todo tipo de quesos, aunque de forma especial con los curados o fermentados.
FRUTOS SECOS
Las nueces son todo un clásico como pareja del queso. Pero también otros frutos secos funcionan muy bien. Por ejenplo, las almendras, pistachos, cacahuetes y las avellanas ligeramente tostados y poco salados son complementos perfectos para los quesos curados.
FRUTAS FRESCAS
- Uvas: contrastan y realzan con cualquier queso, como dice el refrán 'Uvas y queso saben a beso'.
- Peras: acompañan a quesos de pasta prensada con fondo dulce (Idiazabal, Zamorano, Manchego y Azules).
- Manzanas ácidas (Reineta, Grany Smith): refrescan el paladar y sirven como producto a tomar entre quesos.
- Manzana dulce (Verde Doncella, Golden): acompañan a quesos de pasta prensada con fondo dulce (Idiazábal, Zamorano, Manchego y Azules).
- Higos frescos: se asocian perfectamente a quesos azules jóvenes (azul de Valdeón) y a los de cabra de coagulación láctica (Monte Enebro, rollito de cabra).
- Frutas silvestres (frambuesas, fresa, grosella, etc): se complementan con los quesos frescos y los de pasta blanda no demasiado madurados.
MIEL
La miel acompaña a los quesos azules realzando su sabor. También suelen casar perfectamente con quesos frescos.
OTROS MARIDAJES INTERESANTES
-Los quesos frescos (como el Feta, en la imagen inferior) se pueden presentar con un chorrito de buen aceite y una planta aromática (romero, tomillo, orégano...).
-El aceite de oliva virgen es un complemento ideal para quesos frescos.
-El pimentón, para los quesos cremosos como tortas, estos dos elementos gratinados al horno y untados en pan tostado son una delicia.
-Anchoas con quesos semi-curados y curados.
-Verduras (zanahorias, rabanitos, apio...) refrescan y realzan el sabor del queso.