¿Quién no conoce en este país a Alberto Chicote? Empezó a trabajar desde muy joven como chef, y luego se convirtió en una de las caras más conocidas de este país gracias a sus múltiples apariciones televisivas y, en especial, a que cada año desde 2012 presenta las campanadas para despedir el año. Seguimos cada paso que da este gran cocinero, propietario del restaurante Omeraki en Madrid, y experto en ofrecer los mejores trucos y consejos para cocinar. Nos hemos fijado en una de sus publicaciones más populares en redes sociales para preparar unas croquetas que queden cremosas por dentro y crujientes por fuera.
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Chicote fue el pionero en introducir la conocida como cocina fusión en nuestro país y es conocido por todos por programas como 'Pesadilla en la cocina', 'Top Chef', '¿Te lo vas a comer?' o el más reciente 'Batalla de restaurantes'. Y de vez en cuando comparte recetas y trucos en redes, como las croquetas, una elaboración que causa furor desde hace muchos años, en restaurantes, casas o concursos gastronómicos.
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La receta de croquetas de Alberto Chicote
El popular cocinero madrileño comparte su receta para obtener unas croquetas cremosas por dentro y crujientes por fuera.
Echa un litro de leche, 200 gramos de nata y un par de huesos de jamón en un cazo con tapa. Deja cocer a fuego lento durante unos 20 minutos para que la mezcla de leche y jamón se infusione con los huesos, que, pasado ese tiempo, se retiran.
Coloca una cazuela al fuego y echa 100 gramos de mantequilla y 40 gramos de aceite de oliva virgen extra, junto con una cebolla de unos 200 gramos muy picadita para pocharla 10 minutos a fuego suave.
Incorpora 150 gramos de jamón picado muy finamente y deja cocinar 5 minutos más. Añade unos 240 gramos de harina y la rehoga bien durante unos 5 minutos.
A continuación, es el momento de añadir la leche con la nata infusionada, poco a poco, integrándolo bien sin dejar de remover y dejar cocinar todo junto a fuego bajo durante 10 minutos.
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Se sazona al gusto con pimienta molida y nuez moscada y se deja enfriar la masa unas cuantas horas para, pasado ese tiempo, hacer la forma de croquetas -con 2 cucharas o en una manga pastelera-, pasarlas por harina, huevo y pan rallado.
Después, hay que freírlas en aceite, a una temperatura de 170-180 grados hasta que se doren para que queden crujientes por fuera y cremosas por dentro, y sacarlas sobre papel de cocina para eliminar el exceso de aceite ¡y ya tienes estas espectaculares croquetas listas para comer!to