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Teruel es conocido por sus temperaturas implacablemente frías, con inviernos que desafían al termómetro y un aire que muerde. Pero este frío no es una maldición, sino el guardián de esta joya gastronómica.
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La región de Teruel, con su clima frío y una altitud única, imprime una identidad genuina al proceso de producción, convirtiéndolo en un sello de autenticidad.
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Cada loncha es una oda a la autenticidad, con un sabor delicado y bajo contenido en sal.
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La D.O.P. Jamón de Teruel garantiza no solo un producto de calidad excepcional, sino también una apuesta por la sostenibilidad social, económica y medioambiental en su territorio. Es un testimonio vivo de la maestría de generaciones de productores, ganaderos y secaderos, manteniendo puestos de trabajo locales y una cadena de valor esencial en su zona de influencia.
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La próxima vez que organices un brunch, una cena o cualquier reunión especial, sorprende a tus invitados y a ti mismo con un toque de distinción que solo el D.O.P Jamón de Teruel puede brindar.
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