Esta es una de las piezas del pollo más valoradas. De este ave se aprovecha casi todo: muslos, alitas, pechugas, cuartos traseros... -y es una de las más utilizadas para preparar un buel caldo-. Pero los contramuslos son muy apreciados por su jugosidad y porque, bien cocinados, ¡quedan ríquísimos!
En casa, siempre los tenemos tanto frescos como congelados porque gustan a todos y porque se trata de una carne de alto valor nutricional, bajo en grasa, rico en proteínas, vitaminas y minerales, además de ser fácil de digerir.
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¿Dónde se encuentran los contramuslos?
Este corte se encuentra unido al muslo en la parte inferior; y tiene una forma cuadrada. El contramuslo caracteriza por su sabor, textura más tierna y por tener una gran jugosidad. Junto al muslo forma el cuarto trasero -los delanteros están formados por las pechugas y las alitas-.
¿Cómo cocinar los contramuslos de pollo?
Se pueden cocinar de muy diversas formas: asados, a la parrilla, al horno, estofados, a la plancha, guisados... También son una excelente opción para elaboraciones con pollo desmenuzado: tacos, sándwiches, bocadillos, quesadillas...
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Los contramuslos podemos prepararlos enteros pero también sin piel ni huesos, según la elaboración a la que vayamos a destinarlos y te sugerimos que los cocines muy bien para que no queden crudos. Aquí tienes 7 de nuestras recetas favoritas con contramuslos de pollo.
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Contramuslos de pollo con arroz y garbanzos a la cúrcuma
El pollo y el arroz son un tándem que siempre funciona bien, pero, además, les agregamos unos garbanzos y aromatizamos con limón y cúrcuma, que es una especia que aporta unos toques dulces, amargos y picantes. ¿Te atreves a probarlo?
Contramuslos de pollo con patatas al curry
¿Pollo y curry? La mezcla perfecta, al menos param nosotros que somos adictos al aroma y al sabor de esta mezcla de especias. Con ella cocinamos estos contramulos y también con patatas, cebolla, ajos y cerveza, ¿no se te hace la boa agua solo de pensarlo?
Contramuslos de pollo al limón
¡Un auténtico clásico! Este plato se elabora con distintas partes del pollo y de diferentes maneras -nos encanta como lo hacen en los restaurantes chinos-. La nuestra es marinarlo previamente para acabarlo en el horno. La guarnición la pones tú.
Contramuslos de pollo con tomates y espárragos en salsa cremosa
Nos encanta esta forma de preparar los contramuslos. Los marinamos con ajo, hierbas y aceite para después hornearlos con tomates, espárragos y un poco de nata y mantequilla. ¡El sabor es increíble y el aroma que le aportan las hierbas aromáticas también!
Pollo a la mostaza con ajo y patatas
Para esta elaboración podemos utilizar diferentes partes del pollo y, por supuesto, los contramuslos. Quedan muy jugosos. Los hacemos al horno con cebolla, ajo, patatas, brandy y vino blanco y los servimos con hojas de kale, cebolletas tiernas y guisantes, todos blanqueados ¡pura fantasía de plato!
Contramuslos de pollo asados con pomelo al romero
Los cítricos y el pollo son una magnífica 'pareja de baile'. Estamos acostumbrados a cocinar con naranja o limón este ave, ¿pero por qué no hacerlo con pomelo? Dicho y hecho. En este plato le ponemos el rosa y el rojo y, además, le añadimos cerveza y romero. ¡Un equipo absolutamente ganador!
Contramuslos de pollo asados a la alcaravea con patatas y ajos
Para elaborar esta receta nos valen tanto los contramuslos como los muslos o ambos juntos. Es verdad que no solemos usar mucho la alcaravea pero aporta unos toques de anís e hinojo superinteresantes. Lo usamos para asar el pollo con patatas y ajos.