Te hemos mostrado cómo emplearlo, frío o caliente, en aperitivos, ensaladas, sopas y cremas, guarniciones, guisos... ¡y hasta en postres! Tanto en su formato más alargarda como la redonda y más pequeña, ideal para rellenar, que es más habitual en lugares como Italia, Grecia, Francia o diferentes países de Oriente Medio. En España nos decantamos más por el primero, que es un vegetal disponible durante todo el año, aunque el verano es su mejor temporada, y con el que hoy queremos mostrarte cómo convertirlo en deliciosos raviolis sin pasta.
Leer más: calabacín: las recetas más sabrosas y 'enrolladas'
El calabacín, estrella en redes sociales
El calabacín pertenece a la familia de las cucurbitáceas, la misma que la calabaza, el pepino o el melón. Nos gusta por su sabor, textura, bajo contenido en calorías y porque no se nos agotan sus posibilidades en la cocina. Junto al brócoli, el kale, la berenjena, la remolacha o el aguacate, es un vegetal con un enorme protagonismo en redes sociales que no deja de ser tendencia, ya sea por su versatlidad en la cocina como por sus múlitples propiedades saludables. Y es en forma de raviolis una de las formas más buscadas tanto en Instagram como en Pinterest o en Tik Tok.
Cortado en láminas, nos permite rellenar y enrollar como si de la famosa pasta italiana se tratara, pero sin ella. Y estos raviolis son susceptibles de ser cocinados tanto al vapor, como cocidos, a la brasa, en papillote, a la plancha e, incluso, crudos. Es uno de los grades aliados de veganos y vegetarianos o, simplemente, de aquellos que no quieren consumir ingredientes de origen animal por el motivo que sea.
Para preparar raviolis de calabacín, hay que cortarlo en láminas finas ayudándonos con un pelador de verduras.
Leer más: nos chifla el calabacín y también en verano
Raviolis de calabacín, una alternativa deliciosa y supersaludable
El calabacín es también llamado zucchini o zapallo -cuyas flores también se aprovechan en la cocina-, puede tener diferentes colores, generalmente con pequeñas motas en la piel y de tonalidad beige en la pulpa. Para estas recetas tienes que elegir unos verdes y alargados, de tamaño mediano o grande, que sean firmes al tacto y sin magulladuras en la piel. La técnica es hacer láminas con un pelador para que sean lo más finas que puedas. Y a partir de ahí, los rellenaremos con distintos ingredientes y los cocinaremos con varias técnicas.
3 recetas de raviolis de calabacín
Hay muchas más y te animamos a que las descubras, pruebes y experimentes, pero aquí tienes 3 recetas para preparar raviolis de calabacín: con pollo, queso y espinacas y gambas con nueces.
Paso a paso: raviolis de calabacín picantes rellenos de pollo con salsa de mostaza
El relleno en esta receta es a base de pollo muy picado con puerro. Los raviolis los cocinamos a la plancha con guindilla y los servimos con una salsa de mostaza, nata y cebolla.
Paso a paso: raviolis de calabacín, queso feta y espinacas con tomates y pimientos al horno
Prepara el horno porque esta versión la vamos a cocinar en él. Se trata de unos raviolis rellenos de queso feta mezclado con espinacas. Los asamos junto a unas tiras de pimiento rojo y unos tomates cherry.
Paso a paso: raviolis de calabacín rellenos de gambas y nueces
Esta propuesta es en frío. Escaldamos el calabacín, lo secamos y lo rellenamos con una mezcla de gambas cocidas, nueces picadas y mayonesa.