Es inevitable. Cuando escuchamos la palabra ‘palomitas’ resulta difícil no pensar en esos cubos inmensos con los que 'amenizamos' nuestras pelis favoritas en el cine… También en esos paquetes que compramos en el supermercado, ya preparados, para hacer en el microondas en un abrir y cerrar de ojos y disfrutar en casa. El problema es que ese tipo de palomitas no son precisamente interesantes a nivel nutricional, ya que suelen está cargadas de sal, saborizantes y, lo peor, aceites vegetales nada recomendables (grasas hidrogenadas, etc).
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Para que unas palomitas sean saludables debemos hacerlas en casa a partir de granos de maíz y un poquito de aceite
Sin embargo, cuando somos nosotros quienes hacemos esas palomitas caseras, a partir de granos de maíz, con un poquitín de aceite de oliva y una pizca de sal (cocinadas al fuego en una sartén o cazuela), la cosa cambia: pasamos de tener un producto insano a uno perfectamente saludable, ideal como snack…. ¡y no solo como snack!
Hoy os traemos un ejemplo de la versatilidad gastro que pueden tener las palomitas caseras. Y es que, aunque no es lo más habitual, estos maíces inflados y crujientes, pueden convertirse en un ingrediente diferente, sano y delicioso para tus recetas de ensaladas. A continuación, os mostramos unos cuantos ejemplos, aunque aquí tu imaginación (y tu gusto personal) mandan. Para acceder al paso a paso de estas recetas solo tienes que clicar sobre las imágenes:
Paso a paso: Ensalada de kale con palomitas y anacardos
Para esta ensalada vamos a usar el saludable kale como ingrediente protagonista, al que sumamos unos ricos anacardos (¡los frutos secos en las ensaladas siempre son buena idea!) y, además, vamos añadir unas crujientes palomitas recién hechas. Aderezaremos con una salsa casera de anacardos… ¡y a disfrutar!
Paso a paso: Ensalada de rabanitos, canónigos y palomitas
En esta saludable ensalada vamos a combinar tres 'tesoros' de la huerta como son los canónigos, los rabanitos y el calabacín. Aportaremos un toque lácteo añadiendo unos taquitos de queso feta, y el toque crunchy correrá a cargo de unas pipas de girasol y de otro de los ingredientes 'estrella' de esta ensalada: unas palomitas muy crujientes que haremos nosotros en casa.
Paso a paso: Ensalada de peras, granada y palomitas
El abanico de ingredientes que aceptan las ensaladas es prácticamente infinito. Las frutas, por ejemplo, son un producto a tener en cuenta, ya que su toque dulce ofrece un interesante contrapunto de sabor. En este caso vamos a hacer una ensalada de rúcula y pera, a la que vamos a sumar también el toque crujiente de nuestras protagonistas: las ricas palomitas.
Paso a paso: Ensalada con jamón, queso y palomitas dulces
Los contrastes salado-ácido-dulce funcionan muy bien a la hora de preparar las más variadas ensaladas. En lo que al dulzor se refiere, éste podemos conseguirlo gracias a la fruta fresca (peras, manzanas, melocotón…). Pero en este caso vamos a ponernos un poco más originales. Nuestra apuesta: sumar al final unas palomitas dulces, de las que podemos comprar ya hechas en el supermercado. Lógicamente, ésta no es una opción tan saludable como las anteriores dado que, como decíamos, las palomitas ya hechas cuentan un aporte de alto de grasas vegetales y, en este caso, también azúcar. Pero de forma esporádica pueden dar un toque diferente y divertido a tus recetas de ensaladas. ¿Te animas a probar?
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