Después de que Patricia se quedara a las puertas de la final de MasterChef 10, Adrián, David, Verónica y María Lo han tenido que enfrentarse a los últimos retos de la edición para enseñar todo lo que han aprendido y demostrar así que uno de ellos se merecía publicar su propio libro de recetas, el ansiado trofeo, 100.000 euros en metálico y un máster en cocina, técnica y producto en el Basque Culinary Center de San Sebastián.
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Mari Lo ha conseguido el ansiado premio: 100.000 euros en metálico y un máster en cocina, técnica y producto en el Basque Culinary Center.
Para ello, los cuatro finalistas han tenido que seguir los pasos y las órdenes de Carlos Maldonado, ganador de MasterChef 3 y el primer concursante del talent en todo el mundo en conseguir una estrella Michelin, elaborando uno de los platos de su restaurante Raíces. Tras el cocinado, en el que los aspirantes se han perdido en varios momentos por el ritmo acelerado del chef, María Lo se ha convertido en la mejor, consiguiendo la primera chaquetilla de la noche para el duelo final, en el que después también se alzaría como ganadora.
Mari Lo ha demostrado sus dotes culinarias durante todo el programa.
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"Estoy a las puertas de dedicarme a mi gran pasión, que es la cocina. Llevar Lo, el apellido de mi padre, es lo más grande. Estoy orgullosa. Se lo dedico a mis padres y a mi chica. A todos lo que han confiado en mí", ha dicho María muy emocionada. Después de las palabras de la primera clasificada, Adrián, David y Verónica han tenido la última oportunidad de conseguir una plaza en el duelo final realizando un menú elaborado por Joan, Pitu y Jordi Roca, de El Celler de Can Roca para unos comensales muy especiales: jueces de MasterChef procedentes de Ecuador, Israel, Suiza, Polonia, Marruecos, Rumanía y Portugal. Con mucha tensión, nervios y ganas de lucirse frente a los chefs, los tres aspirantes han demostrado que sus platos eran dignos de una final de MasterChef, pero finalmente ha sido Verónica quien ha logrado convencer a los jueces, obteniendo la segunda plaza en el duelo contra María Lo.
"Llevaba varias semanas diciéndome que no iba a ser yo. No me lo puedo creer. Esta chaquetilla me la dedico a mí porque me la merezco, como ha dicho Jordi, ya que me he superado a mí misma mentalmente. Pase lo que pase llegar hasta aquí es para estar orgullosa", ha dicho Verónica entre lágrimas. "Me voy muy contento y satisfecho. Esta experiencia junto a la de haber tenido a mi hijo ha sido la mejor de mi vida. De MasterChef me llevo lágrimas, frustración, aprendizaje... y sobre todo la apertura de un mundo en el que tengo algo que decir", ha añadido David como tercer finalista del concurso.
Mari Lo y Verónica han cocinado al más alto nivel en la gran final.
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Para terminar, Verónica y María han tenido que crear un menú completo compuesto de un entrante, un plato principal y un postre en el que plasmaran todos los conocimientos y técnicas que han aprendido a lo largo de todo el programa, unas elaboraciones que Pepe, Jordi y Samantha han probado junto a Ferran Adrià, fundador de elBulli (3 soles Repsol).
Durante el cocinado, las dos concursantes además han recibido la visita del director de cine Franc Roddam, creador del formato MasterChef, que ha visitado el plató y les ha contado curiosidades del programa. Finalmente, María Lo, que ha sido siempre una de las grandes favoritas, se ha alzado como vencedora de la décima edición del talent de Televisión Española con sus elaboraciones basadas en las diferentes etapas de su vida (desde su niñez en Cádiz hasta sus raíces orientales). Verónica, como segunda clasificada, ha conseguido un máster en Pastelería, y David, como medalla de bronce, ha logrado un curso de especialización de técnicas culinarias de vanguardia de ocho semanas de duración.