La primera vez que apareció la palabra 'cóctel' registrada por escrito fue el 13 de mayo de 1806, concretamente en la publicación The Balance y Columbian Repository, en un artículo escrito por Harry Croswell que decía "un cóctel, pues, es una bebida alcohólica estimulante compuesta de alguna variedad de destilado, azúcar, agua y bítters".
Aunque la práctica de mezclar bebidas ya se hacía desde mucho antes, esta en concreto empezó a alcanzar su máxima difusión en Inglaterra y Estados Unidos a principios del siglo XIX, y su gran popularización se dio en el país norteamericano durante los años 20, coincidiendo con la Ley Seca.
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LA GINEBRA: Uno de los destilados protagonistas de la coctelería
Uno de los destilados más utilizados para preparar cócteles es la ginebra, como el gin tonic por bandera. En los últimos años, esta bebida ha experimentado un boom impensable, al que España ha contribuido en gran medida pues somos uno de los grandes consumidores mundiales con Filipinas, Estados Unidos y Reino Unido.
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La ginebra procede de la destilación de cereales como el centeno, la cebada o el maíz, que se aromatiza e infusiona con bayas de enebro en su receta más original, porque hoy es solo uno de los ingredientes botánicos de los muchos que suele llevar, dependiendo la marca y del maestro blender que la elabore.
Nació con fines medicinales para tratar problemas estomacales y más tarde en compañía de la tónica se tomaba para prevenir y combatir el paludismo.
Ginebras para todos los gustos
La oferta de este destilado -ya sea London u holandesa, sus dos grandes caterorías- es tan amplia, con tantos botánicos, sabores y aromas diferentes que hasta sin alcohol se encuentran opciones en el mercado. Y no hay coctelería, bar, restaurante ni bartender o barmaids que no sepa preparar ya no solo el famoso gin tonic -con numerosas variantes- sino toda una retahíla de cócteles con ginebra.
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Y hoy, 10 de junio, se celebra su Día Internacional. Nos sumamos desde ¡Hola.com! a esta celebración de la ginebra con 7 propuestas para que prepares en casa, bebas con moderación y brindes con los tuyos por lo que más te apetezca.
Paso a paso: cóctel de ginebra, tónica, limón y tomillo
Nos inspiramos en el clásico gin tonic, que nunca pasa de moda, para hacer este cóctel que lleva ambos ingredientes y, además, zumo de limón, limoncello y tomillo.
Paso a paso: cóctel destornillador
Este es uno de los cócteles más clásicos que hay y parece que toma su nombre porque cuando lo crearon, soldados norteamericanos durante la Segunda Guerra Mundial, mezclaban sus ingredientes con un destornillador. En lugar de vodka, lo hacemos con ginebra.
Paso a paso: cóctel de vermú y fresa
Nos inspiramos en el Dry Martini para hacer esta propuesta, pues mezclamos en la coctelera ginebra, vermú y también un poco de jarabe de fresa.
Paso a paso: cóctel de ginebra con pomelo y romero
El zumo de pomelo tiene un sabor inconfundible que le va muy bien a la coctelería y especialmente a elaboraciones con ginebra. Aromatizamos con romero y, como casi todos los cócteles, lo servimos muy frío.
Paso a paso: cóctel Granadina Gin
Contrarrestamos el amargor de la tónica y el alcohol de la ginebra con un poco de granadina. Le ponemos mucho hielo y un toque de zumo de lima.
Paso a paso: gin tea tonic
Si eres amante del té y del gin tonic, este cóctel te va a encantan porque es una mezcla de ambos. Con la infusión logramos suavizar su sabor y algo de graduación alcohólica.
Paso a paso: cóctel de ginebra con frambuesas congeladas
Una opción que lleva tan solo tres ingredientes y mucho (mucho) hielo. Sírvelo en copa de Martini y siempre antes de una gran comida, pues es perfecta como aperitivo para abrir el apetito.