Fueron pocas horas, pero lo cierto es que la visita exprés de Don Felipe y Doña Letizia el pasado lunes a Viena dio mucho de sí. Invitados por el presidente Federal de Austria, Alexander Van Der Bellen, y de su esposa, Doris Schmidauer, los Reyes de España tuvieron una apretadísima agenda: bienvenida oficial, inauguración de una exposición de arte en el Museo Belvedere de Viena, un homenaje a las víctimas del nazismo…
Los Reyes de España, durante su reciente visita a Viena
Entre todos estos actos hubo también ocasión para la celebrar un almuerzo en el Palacio Imperial de Hofburg, que en este caso llevaba la firma de un chef tan excepcional como talentoso: Juan Amador. Decimos excepcional, porque este cocinero, nacido en Alemania e hijo de emigrantes granadinos, está al frente del único restaurante de Viena que puede presumir de lucir tres estrellas de la prestigiosa Guía Michelin. Un establecimiento que lleva su nombre, ‘Restaurante Amador’, y cuya oferta gastronómica fusiona sabores de distintos rincones del mundo, donde no faltan, claro, los españoles.
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El cocinero Juan Amador presume de estrellas Michelin
Así pues, no fue casual la elección de este cocinero como artífice del menú, que para la ocasión optó por una serie de vistosos snacks, un gazpacho como entrante, al que le sucedieron productos típicamente locales como perca del lago Neusiedl o lomo de venado de los bosques de Viena. La nota dulce la puso una deliciosa versión que Amador hizo del clásico strudel de manzana (postre típicamente centroeuropeo). “Gracias por tenernos, fue un placer”, escribía en chef en sus stories de Instagram, en una imagen donde posaba junto a su equipo de cocina en las dependencias del imponente Palacio Imperial de Hofburg . También publicó Amador en sus redes algunas fotografías como éstas que vemos aquí debajo que ilustran el proceso de elaboración de un menú que, a buen seguro, resultó ser un espectáculo...
Algunas de las 'stories' publicadas por Juan Amador a propósito del almuerzo celebrado en Palacio Imperial de Hofburg
Una carrera plagada de éxitos
Un honor para cualquier chef recibir un encargo de tal magnitud, que en este caso, Amador suma a su larga lista de hitos profesionales. Y es que, desde que con solo 24 años recibiera su primera estrella Michelin cuando trabajaba en el restaurante ‘Petersilie’ (Lüdenscheid, Alemania), este cocinero no ha dejado de cosechar éxitos. Durante sus años en diversos restaurantes, también en suelo alemán, fue replicando premios y galardones, hasta que ya en 2004 abrió su propio restaurante con su nombre en Fráncfort . Para 2007 ya tenía la tercera estrella…
Comedor del 'Restaurante Amador', en Viena
Su carrera no dejó de ascender una vez se trasladó a Viena. En 2016 abría restaurante en la capital austríaca (también bajo el nombre de ‘Amador') y para 2019 la Guía Michelín ya le había condecorado con su máxima distinción.
¿La 'culpa'? Un talento desbordante para la cocina, platos muy personales, elaborados con la disciplina de una atleta. “Para mí la cocina es más deporte que arte, es como el fútbol, tenemos la final todos los días, por la tarde, por la noche”, declaraba Amador en una entrevista concedida a Efe en 2019.
Personal, multicultural y muy técnica, así es la cocina de Juan Amador
También, como decíamos, la multiculturalidad de su propuesta es clave del éxito de ‘Amador’, precioso restaurante de ladrillo visto, que recibe visitas de clientes de medio mundo. Solo echando un ojo al menú de su web (295 euros) encontramos referencias a España (chorizo, atún de almadraba, aceite de oliva…), pero también a Francia, Asia… y, claro, a la despensa vienesa. Ésa que Amador defiende siempre que tiene ocasión: “Viena tiene una variedad gastronómica que ofrecer que aún se subestima, con ingredientes excepcionalmente buenos”, reivindica el cocinero.
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