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Impresiona escuchar a algunos de esos jóvenes venezolanos, que han venido a Madrid para contar su historia: un pasado como miembros de peligrosas bandas delictivas -muchas criminales- en su país que ahora se han reinsertado, gracias al rugby y al mundo de la coctelería. Y esto ha sido posible debido a la existencia del proyecto Alcatraz, puesto en marcha por la marca de ron Santa Teresa, la primera marca y productora de ron de Venezuela.
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Wilkinson y Anther han compartido su experiencia en el restaurante Puertalsol, bajo la atenta mirada del cocinero Alberto Chicote -gran amante del rugby y ex jugador durante su juventud- y del presidente de la compañia, Alberto Vollmer, que mostró su orgullo por este programa propio de reinserción social para jóvenes y adultos con problemas de conducta a través de la formación en valores, educación para el trabajo, la justicia restaurativa y con el rugby como vehículo de transformación. “Ellos son nuestro orgullo porque nosotros somos un proyecto que casualmente hace ron, no un ron que hace proyectos”, aseguró.
Wilkinson Arrieta y Anther Herrera, miembros del proyecto Alcatraz y embajadores de Ron Santa Teresa
“Para mí el Proyecto Alcatraz fue la oportunidad de cambiar mi vida, de transformarme y dejar mi pasado atrás”. “Proyecto Alcatraz fue un hito en mi familia y en el pueblo de donde vengo. Gracias a ellos, mi padre y su banda decidieron transformar sus vidas y es por ese cambio que yo puedo acompañarlos hoy como embajador de Santa Teresa 1796”. "Aprendí valores como el respeto, la humildad, la educación...". Estas son algunas de las palabras de estos dos jóvenes -que entraron a formar parte en algunas bandas desde niños- hoy reconvertidos en barmans y en embajadores de la marca, que deleitaron a los asistentes con dos deliciosos cócteles a base de este ron añejo elaborado mediante el antiguo método de Solera, un proceso artesanal en barricas de roble que tradicionalmente se había reservado para los vinos de jerez y el brandy español.
Logros del Proyecto Alcatraz
El origen del proyecto hay que encontrarlo 18 años atrás y gracias a él se ha conseguido desarticular sin el uso de la violencia un total de 11 bandas criminales -entre las que también hay niños-, trabajar en 32 cárceles de Venezuela (20 masculinas y 12 femeninas), reducir de 114 a 12 los homicidios por cada cien mil habitantes en los 10 primeros años del Proyecto en Revenga (donde se encuentra la Hacienda Santa Teresa) y ayudado a más de 200 jóvenes gracias a su proyecto de reinserción social y a los valores del rugby.
Los dos miembros del proyecto Alcatraz junto al presidente de la compañía, Alberto Vollmer, y Alberto Chicote
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Alberto Chicote y su relación con el rugby
Alberto Chicote nos contó que "el rugby me ha hecho mejor persona. Es un deporte que tiene muchos valores compartidos con la cocina. Y un jugador de rugby nunca deja de serlo aunque ya no practique, precisamente por esas grandes enseñanzas: trabajo en equipo, sacrificio y respeto reverencial por los compañeros y por el árbitro". El televisivo cocinero, además, cocinó algunos platos creados con el popular ron venezolano.
