- Los racimos deben ser macizos y los frutos firmes, con la piel lisa y tamaño uniforme.
- Las variedades negras o rojas no deben presentar ninguna señal verde.
- Al comprarlas se debe agitar el racimo muy suavemente; los granos deberán permanecer en su sitio y, si cae alguno, querrá decir que la uva está demasiado madura.
- Si quieres que en casa duren más, se conservan bien en bolsas de papel y colgadas hacia abajo, para que los granos se separen unos de otros y no se toquen entre sí.
- En el frigorífico pueden conservarse hasta 15 días.
- Es recomendable sacarlas de la nevera una hora antes de consumirlas para que mantengan todo su sabor y aromas.
- En fresco te recomendamos que las conserves en la nevera, con espacio suficiente para que no se choquen con otras frutas, y que las saques un rato antes de consumirlas.
Para ti que te gusta
Este contenido es exclusivo para la comunidad de lectores de ¡HOLA!
Para disfrutar de 8 contenidos gratis cada mes debes navegar registrado.
Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.Ya tengo una suscripción. Inicia sesión
Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciadaTIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE
Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.