Como recordaba Jordi Cruz el martes pasado, los aspirantes son muy conscientes ya de que cada vez les quedan menos oportunidades para demostrar que merecen ser ganadores de MasterChef 9. Y es que, tras la salida de Toni (último concursante en decir adiós al talent), la semifinal asoma ya en el horizonte. Para alcanzarla, los aspirantes tendrán que superar con éxito las pruebas de esta noche, algunas de ellas, nada sencillas.
El primer reto tendrá, además, un componente emocional añadido: la visita, por sorpresa, de algunos de sus familiares más cercanos. Estos acudirán al plató para darles una inyección de energía en la recta final del programa, animándoles durante el cocinado. En esta ocasión, del desafío consistirá en elaborar platos que les trasladen a sus infancia, pero, eso sí, actualizándolos, e incorporando una técnica de vanguardia. Además, el finalista de la octava edición de MasterChef Junior, Javier, visitará también las cocinas en esta prueba (cuyo ganador tendrá el privilegio de que su plato será incluido en la carta del restaurante MasterChef durante toda la temporada).
“Bienvenidos a vuestras primeras prácticas profesionales”
Así les presentará el jurado a los concursantes su ‘misión’ durante la prueba de exteriores. Un reto que les llevará hasta la comarca de La Garrotxa (Girona), donde se ubica uno de los mejores restaurantes del país: Les Cols. Con dos estrellas Michelin y tres Soles Repsol, el templo gastro que la gran cocinera Fina Piugdevall capitanea (hoy día, junto a sus tres hijas) es un ejemplo de sostenibilidad, de producto de Kilómetro 0 y de compromiso con la buena mesa y con el medio ambiente.
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En sus cocinas, los aspirantes trabajarán a las órdenes de sus jefes de partida, tal y como lo harían en un servicio real. Así, cada equipo tendrá que preparar dos platos para 32 profesionales, que no deben notar que las recetas están elaboradas por personal ajeno al restaurante. Una prueba nada fácil, pero que tendrá una gran recompensa para los ganadores: convertirse automáticamente en semifinalistas de esta edición.
Reto final con sabor a café
Para la última prueba de la noche, los delantales negros deberán concentrarse al máximo, dada la complejidad del reto: reproducir un postre con forma de taza de capuchino, creado por el gran maestro repostero Jordi Bordas (primer español es proclamarse Campeón del mundo de Pastelería en el año 2011). Y decimos que deberán darlo todo porque la preparación de dicho dulce requerirá un extenso número de elaboraciones, a saber: un bizcocho de café, una ganache montada de chocolate, un crujiente de café, una mousse ligera de chocolate negro, una mousse de chocolate blanco y vainilla, una cobertura de chocolate blanco… Todo ello, con la presión, como siempre, del reloj en cuenta atrás. Al menos, los concursantes contarán en esta ocasión con los ánimos de la actriz Maribel Verdú, invitada en esta parte final del programa de hoy.
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