El pasado mes de diciembre los fans de MasterChef fueron (fuimos) muy felices: en solo un mes pudimos disfrutar de la final de MasterChef Celebrity (con Raquel Meroño como vencedora), de una nueva edición de MasterChef Junior, incluso de un especial MasterChef Abuelos dedicado a los más mayores de la casa.
No han pasado ni cuatro meses y, sin embargo, ¡ya hay ganas de más MasterChef! La buena noticia para todos esos seguidores incondicionales del programa es que esta misma noche arranca una nueva edición de la versión más clásica: 16 concursantes anónimos, aficionados al fogón, que lucharán durante varias semanas por hacerse con el trofeo del ‘talent culinario más duro de la televisión’.
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Tal y como os contábamos el viernes pasado, los miembros del jurado (ese trío irrepetible formado por Pepe Rodríguez, Jordi Cruz y Samantha Vallejo-Nágera) ya han adelantado que nunca habían visto un casting tan concurrido ni con tanto nivel como esta vez. Ni más ni menos que 70.000 inscritos, ahí es nada… (un récord en el que, muy probablemente, han influido esas largas horas de confinamiento que hemos vivido, y que muchos han aprovechado para sacar su lado más cocinillas).
De entre todos esos miles de personas que quisieron entrar en el programa, solo 50 consiguieron superar el casting. Y, precisamente, hacer que esa cifra baje hasta los 16 aspirantes definitivos va a ser el cometido de los jueces durante la primera parte del programa de esta noche.
Una vez elegidos sus nombres, llegará el turno de su debut. Para ello, viajarán hasta Mallorca, donde les espera todo un desafío: cocinar, divididos en dos equipos, un menú solidario diseñado por los chefs Maca de Castro y Santi Taura (cuyos restaurantes se ubican en esta isla balear, ambos premiados con una estrella Michelin). Así, los concursantes deberán preparar 150 raciones en el Parc de la Mar (en un escenario de lujo, con la Catedral de Mallorca y el Paseo Marítimo de Palma como testigos de excepción), tomando el relevo de la Asociación Zaqueo, dedicada a labores humanitarias de reinserción social.
De vuelta en plató les esperará un reto más complicado si cabe, especialmente teniendo en cuenta que se trata solo del primer programa de la temporada. Y es que la primera ‘Caja misteriosa’ de esta edición esconde un producto nada sencillo de cocinar: la lamprea, también llamada vampiro de agua. Uno de esos pescados que por su aspecto (algo ‘monstruoso’) no deja a nadie indiferente y que muy pocos chefs se atreven a cocinar.
En España la lamprea solo puede pescarse en las aguas de Galicia. Y será desde allí desde donde llegue el prestigioso chef Pepe Solla (Casa Solla, Pontevedra, una estrella Michelin) para demostrar que, bien cocinada, la lamprea puede convertirse en un verdadero manjar. Los aspirantes tendrán que tomar buena nota de sus consejos si no quieren ser los primeros en colgar el delantal…
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