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Polifacético, vitalista, algo excéntrico y divertido. El empresario, músico y pintor Aldo Comas, casado con la conocida actriz Macarena Gómez y padre del pequeño Aldo, de 5 años, encuentra su refugio particular por las mañanas en Murillo Café.
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De la mano de la iniciativa de ¡HOLA! y Coca-Cola para apoyar a la hostelería española, Aldo nos descubre este local que sirve comida bistró mediterránea y que conserva esa vena artística que tanto le caracteriza.
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Situado junto al mítico Museo del Prado de Madrid. Este local, cuyo nombre hace homenaje al pintor español Esteban Murillo, tiene una oferta gastronómica que abarca desde tapas tradicionales hasta platos ligeros preparados al grill.
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Aldo nos confiesa que, si pudiera invitar a alguien a comer aquí, sería a Picasso y le obligaría a probar los huevos benedictinos.
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Quizás es el diseño del restaurante, que conserva algo del sabor del antiguo café que fue en 1927, donde reside todo su encanto. Además, cuenta con vistas al Museo del Prado y al Jardín Botánico.
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El menú de Murillo Café es apto para todos los gustos. Para los que disfrutan empezando el día con energía, los brunchs de este local son ideales. Si lo que prefieres es quedar para comer o para cenar, puedes elegir cualquiera de sus primeros o segundos platos.
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Asimismo, adaptándose a la situación provocada por la pandemia, Murillo Café hace repartos a domicilio o da la opción de recoger en el propio local.