Qué pensarían griegos tan ilustres como Homero o Alejandro Magno si alguien les hubiera contado que, muchos siglos después de su muerte, aquel queso feta tan rico del que ya disfrutaban en la Grecia precristiana, llegaría a ser viral (cierto es que, quizá, sería interesante explicarles primero el concepto de viralidad…).
Efectivamente, si os gusta seguir perfiles de recetas en redes como Instagram o TikTok, habréis podido comprobar cómo uno de los platos más replicados -hasta el infinito y más allá- en los últimos tiempos ha sido el llamado Baked Pasta Feta. Una receta que, en realidad, nació en 2019: su autora, la bloguera gastronómica finlandesa Jenni Häyrinen (imagen superior), la publicó en sus redes y tal fue el éxito cosechado en el país nórdico que las ventas de feta se dispararon como nunca hasta ese momento. En 2020, la receta se popularizo también en Estados Unidos de la mano de la cocinera MacKenzie Smith (conocida en redes como @grilledcheesesocial). Su adaptación del plato obtuvo también infinidad de likes, al igual que la versión publicada hace escasos días por la autora de la influyente cuenta gastro @feelgoodfoodie (con más de 2,5 millones de followers en Instagram).
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Tras dicha publicación, las redes comenzaron pronto a llenarse de interpretaciones de la receta. En España, por ejemplo, vimos versiones en cuentas tan influyentes como las del nutricionista Carlos Ríos o el Chef Bosquet… La viralidad tuvo tal alcance que incluso la autora original publicó un vídeo en su cuenta de Instagram recordando el paso a paso de la receta auténtica publicada por ella dos años atrás: unos tomates cherry horneados con un bloque de queso feta, un toque de chile y de ajo, y unos espaguetis previamente cocidos que se añaden en el último momento.
VIAJE A GRECIA CON EL PALADAR
Realmente, no es extraño que un plato así coseche tanta aceptación: ingredientes sabrosos, populares y asequibles; elaboración sencillísima; vistosidad… En definitiva, una receta que te apetece replicar en casa, y que además a nosotros nos ha hecho recordar la versatilidad de su ingrediente 'estrella': el feta. Un queso que nos encanta, icono absoluto de la despensa griega, elaborado con leche de oveja o cabra y curado después en salmuera. De hecho, el auténtico queso feta griego, amparado por su propia DOP (Denominación de Origen Protegida), solo puede producirse con leche de ovejas y cabras autóctonas y en su proceso de elaboración no puede intervenir ningún tipo de colorante o conservante artificial.
Color blanco, textura flexible y granulada, un sabor intenso y salado con un ligero toque picante… Son las características de esta delicia láctea que, en los mercados, podemos encontrar en distintos formatos: bloques, placas rectangulares, dados de mayor o menor tamaño… Distintas opciones entre las que podemos elegir en función del uso que vayamos a darle.
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RECETAS CON FETA: ENSALADAS… ¡Y MUCHO MÁS!
Uno de esos usos más comunes es, sin duda, el terreno de las ensaladas (unos daditos de feta pueden animar hasta la ensalada más triste…). También es ideal para la preparación de infinidad de tapas y aperitivos. Pero, como hemos visto, también funciona muy bien como ingrediente de recetas al horno… A continuación, hemos reunido un buen puñado de ideas donde el queso feta se convierte en una guest star de lujo. Para acceder al paso a paso solo tienes que pulsar sobre el nombre de cada plato.
Paso a paso: Ensalada de tomate, queso feta y aceitunas
Facilísima, sabrosa y con un toque muy mediterráneo. Así es esta ensalada de tomates y queso feta, entre cuyos ingredientes incluiremos también unas rodajas de pepino y de cebolla morada. Un primer plato fácil y, además, muy saludable.
Paso a paso: 'Crostini' con granada, arándanos y queso feta
Los' crostini' son un aperitivo italiano consistente en pequeñas rodajas de pan tostado o a la parrilla con ingredientes encima, que pueden ir desde quesos, carnes o verduras, con aceite de oliva y alguna hierba aromática.
Paso a paso: Huevos revueltos con judías verdes y queso feta
Los huevos revueltos son perfectos para solucionar una comida o cena de forma rapidísima. Además, admiten casi tantos ingredientes como la imaginación permita. En este caso vamos hacerlos con queso feta y judías verdes.
Paso a paso: Ensalada de aguacate, queso feta y granada
En esta ensalada tan pintona vamos a utilizar, además de nuestro protagonista de hoy, el queso feta, otros elementos como aguacate, granada y cebolla morada.
Paso a paso: Quiche de calabacín y queso feta
Con calabacín y queso feta vamos a elaborar una exquisita receta francesa de quiche, el pastel salado más popular. Podrás consumirlo frío o caliente, servirlo como entrante en una comida o cena.
Paso a paso: Crepes con feta, tomate y menta
Aunque asociamos las tortitas y crepes al mundo dulce también podemos prepararlas con ingredientes salados como en este caso. Perfectas para una cena o desayuno diferente.
Paso a paso: 'Dip' de remolacha y queso feta
La palabra 'dip' hace referencia a una salsa para mojar un alimento más sólido, como por ejemplo el guacamole y los nachos. En este caso, te presentamos una especie de crema de remolacha, queso feta y yogur, que decoraremos con piñones y serviremos con pan tostado para untar.
Paso a paso: Pasta con calabaza, queso feta y pipas
Otro plato en que vemos cómo la combinación de pasta + feta funciona muy bien. En este caso se trata de una ensalada en al que vamos a añadir también calabaza, pipas y piñones.