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Está demostrado que comer pipas, que siempre ha sido un agradable pasatiempo para los españoles, es una fuente de salud y nutrientes beneficiosos.
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Al ser ricas en vitaminas E, zinc, niacina, hierro y ácidos grasos, las pipas de girasol contribuyen a la hidratación, crecimiento y salud de nuestro cabello. Las semillas de girasol cultivadas en diversas regiones de los Estados Unidos son cuidadosamente elegidas y procesadas siguiendo los mayores estándares de calidad para satisfacer las necesidades del consumidor español, que valora la alta calidad, sabor y gran tamaño de las semillas de girasol estadounidenses, junto a sus atributos saludables.
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No hay nada como disfrutar de una buena película tomando unas pipas de girasol en buena compañía, fomentan la interrelación entre personas mientras nos aportan nutrientes.
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Cuando decimos “esto se come como las pipas” estamos hablando de un producto fácil de consumir, rico y que crea cierta "adicción", beneficiosa como pocas, siempre que la moderación presida su consumo, claro.
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Las pipas de girasol pueden formar parte de nuestra dieta como las semillas de amapola o sésamo, que tan arraigadas están en las costumbres gourmet.
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Durante acontecimientos deportivos, las pipas de girasol son un buen recurso para calmar los nervios y compartir un aperitivo rico y saludable con los amigos.
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Truco con pipas: se puede conseguir un snack muy sabroso en un momento, basta freír un puñado de pipas de girasol peladas en una sartén con un poco de salsa de soja. La sartén se deja en el fuego hasta que la salsa se evapore. Y listo.
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Así que, está claro, incorporar estas semillas de girasol a nuestra dieta como un ingrediente más en la cocina es una gran idea para fortalecer nuestra salud y animar muchas recetas.